De acuerdo con la Real Academia de la Lengua Española (RAE), un botadero es un desorden e igual puede ser un basurero. En Wikipedia, “la enciclopedia de los estudiantes”, ni siquiera aparece la palabra.
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Un botadero en Marketing BTL se refiere a un exhibidor. Aunque hay muchos estilos, dependiendo de su creador, por lo regular son cubos desarmables de fierro o de plástico que sirven para exhibir producto a granel.
Los botaderos existen en diferentes niveles, algunos son circulares otros cuadrados y en ocasiones hasta llantas les ponen, a fin de hacerlos más eficientes en el piso de venta.
La ventaja de estos exhibidores es que se puede colocar una gran cantidad de producto en poco espacio. La desventaja es que de no adornarlos bien pueden parecer simples cubos sin chiste o rejas metálicas sin pizca de creatividad.
Otra ventaja de los botaderos es que son muy económicos, de este modo no sólo los vas a encontrar en las grandes tiendas, sino en las llamadas “tienditas de la esquina”, pues son aptas y eficientes para cualquier negocio.
Un botadero entonces es un soporte, cuyo encanto está en cómo se va a utilizar en el punto de venta y cómo los responsables del marketing lo van a adornar y a eficientar para lograr no sólo mayor exhibición de producto sino mayores ventas en el canal.
