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Walmart obtuvo resultados de un experimento en una tienda donde quitaron a los cajeros y cobra con self-checkout, podrían extender el sistema a todas sus tiendas.
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Se requiere menos tiempo preparar al personal para esta función y ayuda a aminorar las oxidadas filas del super.
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Las ventas de la retailer crecieron un 3.9 por ciento, hasta 29.766 millones de dólares a nivel internacional
Previamente revelamos que Walmart estaba haciendo un experimento en una tienda de Fayetteville, Arkansas, donde quitaron a los cajeros y ahora está funcionando solamente con autoservicio o self-checkout.
Esto consiste en eliminar la línea de cajas de cobro, para dar paso a un sistema de pago por medio de máquinas que podrían potenciar el servicio al cliente en medio de la pandemia, cuando lo que menos se quiere es tener contacto con otras personas y poner en riesgo la salud de empleados y clientes.
Bajo esta premisa, las filas en las cajas – cada vez más grandes debido a la sana distancia- podrían ser eliminadas, impactando directamente en el tiempo de clientes y de la retailer, algo que ya están considerando expandir luego del experimento con las 34 líneas de check-out en la tienda mencionada.
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En un artículo del blog de la compañía, John Crecelius, vicepresidente senior de desarrollo de innovaciones de Walmart, reconoció que la posibilidad de que expanda a otras tiendas es enorme, luego de revisar los resultados del experimento. Entre las ventajas destacan:
- Dijo que entre las ventajas se registró que el personal dedicado a cajas y reasignado a esta zona, para ayudar y mantener la interacción cara a cara, ha visto mejoras como liberar de carga a parte de su plantilla y convertir esta experiencia – a menudo impersonal- en una con mayor interacción.
- También detectaron que agiliza el proceso de pago en el establecimiento y frena la frustración entre los compradores cuando tienen que esperar en la fila.
- Se requiere menos tiempo preparar al personal para esta función, solo un día, en comparación con el que se lleva formarlo a la hora de utilizar una caja registradora que suele ser de 40 horas.
En función de los resultados obtenidos, la compañía estadounidense podría extender la metodología al resto de sus supermercados, aunque no ha detallado la fecha exacta de ello.
