De acuerdo con la investigación “Timocracia” de Rubén Sánchez, los consumidores pueden sufrir hasta 15 tipos de fraude en las rebajas y esto surge como consecuencia de las malas prácticas comerciales que pasan por alto las autoridades de protección al consumidor, por el déficit de control del mercado y las ínfimas sanciones.
Estos engaños pueden ser, según Timocracia, desde prácticas fraudulentas que van desde manipular las etiquetas hasta la negativa de ciertos comercios a realizar devoluciones sobre artículos con defectos de fabricación. Pese a eso, consumidores se percatan de ello.
Estos engaños pueden ser según afirma el especialista, desde “prácticas fraudulentas que van desde manipular las etiquetas” hasta “la negativa de ciertos comercios a realizar devoluciones sobre artículos con defectos de fabricación”. A pesar de ello, los consumidores se percatan de ello.
En una encuesta elaborada por FACUA se desprende que 8 de cada 10 consumidores detectan los fraudes. Así, el 35% señala que ha observado los timos en algunos comercios; el 24% dice que en la mayoría; otro 24% afirma que en casi todos; y solo el 17% no ha constatado ningún fraude.
Entre los tipos de engaños que se pueden sufrir, destacan los siguientes:
- Venta de productos devueltos como si fueran nuevos.
- La ropa con los supuestos descuentos no se vendía en el establecimiento antes de las rebajas.
- Para encontrar los productos rebajados hay que pedir un mapa a la entrada del comercio.
- Los comercios no admiten devoluciones en rebajas, algo que sí está permitido.
- Rebaja de la garantía en este tipo de productos, cuando en realidad no varía en nada con el hecho de estar en rebajas.
- No poder pagar con tarjeta los productos rebajados.
- El producto cuesta lo mismo en rebajas que en el periodo habitual.
- Aumentar el precio de los productos un tiempo antes para minimizar la rebaja.
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