Amigos de @InformaBTL, quienes de nosotros no hemos vivido la “perdida” de nuestro #Smartphone, ya sea porque nos lo robaron, lo perdimos o simplemente porque se descompuso o dejó de funcionar, y como buenos mexicanos que somos NUNCA le hicimos un RESPALDO o BACKUP a nuestra información, fotografías, contactos y un larguísimo etcétera; ¿A poco no les ha pasado?
Dicho lo anterior, lo único que quiero evidenciar es la DEPENDENCIA REAL que hoy en día ya tenemos de nuestros TELÉFONOS MÓVILES, llamados en otras épocas: CELULARES…, digo se los aclaro porque algunos de la Generación Z un día leerán este artículo y pensarán que es como de ciencia ficción, pero a los #Millennials no les aclaro nada porque me entienden perfecto y además, ya van de salida como referente de “juventud progresista” para ingresar a la VIDA REAL, así que pronto veremos si son tan buenos para Tuitear como para salir adelante en la vida…, pero bueno, eso es otra historia.
Así que, y volviendo a nuestro tema de hoy que son los #Smartphones, pues resulta claro que más allá de la mencionada DEPENDENCIA que les mencioné en el párrafo anterior, también aparece el SENTIDO DE PERTENENCIA que TOOOODOOOOSSS tenemos hacia las COMUNIDADES DIGITALES, ya sean nuestras REDES SOCIALES o los miles de CHATS a los que pertenecemos, mismos que van desde el de nuestra FAMILIA más cercana (PAPÁ, MAMÁ, HERMANOS) hasta el de la FAMILIA que nunca vemos, pero que por alguna extraña razón quieren tenernos en un CHAT que pasa desde los memes, las frases motivadoras, los chismes y en muchos casos hasta peleas totalmente digitales y por ende, irrelevantes.
Obvio, también existen los “CHATS SERIOS”, “DE TRABAJO” o de algún GRUPO o ASOCIACIÓN PUBLICA O PRIVADA a la que pertenezcamos, mismos en que nunca falta el despistado que postea alguna vulgaridad o escribe algo que “no debe” en ese grupo, pasando también, por los de “DESMADRE” abiertos normalmente por grupos de amigos, ya sean hombres o mujeres donde se envía cualquier cantidad MEMES, PORNOGRAFÍA, CHISTES y demás cosas irrelevantes que nos saturan la memoria, pero nos entretienen diariamente en los momento de aburrición.
Y así, puedo seguir con cientos de variantes de estos CHATS y demás interacciones digitales que tenemos todos los días con muchas personas, ya sean NUESTRAS PAREJAS, AMIGOS, COLABORADORES, CLIENTES, EMPLEADOS, etcétera, misma tendencia de este Siglo XXI, que nos hace funcionar en un mundo que pasó su virtual “SECOND LIFE” * a su REAL LIFE y viceversa.
Es decir, la importancia del #Smartphone creció exponencialmente en los últimos DIEZ AÑOS y me permitiría anticipar que todavía daremos un salto cuántico en ese rubro en la siguiente década que esta por empezar, ya que, sin duda, la implementación de Apps en cualquier tema de nuestra vida diaria estaría propiciando que nuestra CO-DEPENDENCIA DIGITAL vía SERVICIOS MÓVILES Y DE TRANSMISIÓN DE DATOS llegue al punto de ser incontrolable.
Finalmente, es un hecho que nuestra “VIDA REAL” se ha empezado a situar frente a una pequeña pantalla de nuestro #Smartphone y por esto, vivimos con la incertidumbre eterna de que ya no tenemos batería suficiente para seguirlo utilizando; o tal vez, no se nos acabó el saldo de los datos para acceder a internet y estamos desesperados buscando el WiFi más cercano para conectarnos y seguir “VIVOS EN LA RED”, ya que al final lo que queremos al seguir interconectados es continuar “SIENDO ALGUIEN” en el MUNDO DE TODOS, pero donde ese “TODO” es de muy pocos; Al tiempo.
Si tienen alguna duda no dejen de mandarme sus comentarios y con gusto se los responderé.
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