La infraestructura tecnológica actual ha permitido a las empresas ser mucho más productivas y eficientes que nunca antes. Pero también han presentado nuevos retos. Por ejemplo, ahora los negocios tienen que preocuparse por asegurar sus equipos, de forma que no se corra el riesgo de quedarse sin una plataforma de trabajo. En esta misma línea entra el concepto DRP, uno de los más importantes para la continuidad operativa de las marcas ante una emergencia.
¿Qué es un DRP (Disaster Recovery Plan)?
Por sus siglas en inglés, el concepto significa “Plan de Recuperación ante Desastres”. En otras palabras, es un protocolo de la organización que le permite regresar a las operaciones ante una eventualidad. Se trata de un proyecto altamente complejo, que requiere contemplar tanto los procesos de trabajo como lugares físicos, personas, hardware y software, etcétera. Es muy distinto de la alta disponibilidad, aunque el objetivo de ambos conceptos es casi el mismo.
¿Porqué es conveniente tenerlo en tu organización?
Es imposible predecir un desastre, no importa si es un ataque cibernético o alguna catástrofe natural. Y en la mayoría de los casos, aún si se pudieran prever, muchas veces no hay mucho que puedan hacer las empresas para prevenir los daños. En este sentido, un DRP asegura que una compañía puede volver a trabajar a pesar del impacto inicial de este fenómeno. Algo que, en el largo plazo, asegura que la marca pueda ponerse de pie lo más rápido que sea posible.
¿Cuáles son sus funciones?
Un DRP, como ya se dijo, básicamente permite a las empresas regresar a la acción luego que un desastre limitara su capacidad de operación. Lo anterior contempla tanto la recuperación de información como la reestructura del equipo de trabajo para darle continuidad a todo el negocio. Se estima que el 60 por ciento de las empresas que no tienen este plan cierran tras seis meses del incidente. Así que su función principal es impedir que las compañías quiebren.
¿Qué herramientas se necesitan para implementar un DRP?
Hay muchos elementos que están involucrados en este tipo de iniciativas. Entre los puntos más básicos se cuenta un respaldo de información de la empresa, así como un espacio de reserva para la operación de aplicaciones. También se requieren escritorios remotos y un manual de operaciones. Sin embargo, las necesidades de cada empresa van a ser muy distintas. Aquí, agentes como Mac Computadoras pueden dar toda la asesoría necesaria.