Este jueves, uno de los aviones de Malaysia Airlines cayó en Ucrania, cerca de la villa de Hrabove, en Donbas, lo que dejó un saldo de 290 pasajeros muertos. Con este lamentable accidente, ya son dos ocasiones que la aerolínea se coloca en una situación poco agradable, ya que el 8 de marzo pasado, el vuelo MH370 desapareció en el océano índico, lo que dio pie al llamado misterio sin fin.
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En medio de estas noticias lastimosas a nivel social, el desprestigio de la aerolinea Malaysia Airlines va en aumento, al grado que no sólo abundan los comentarios en su contra a través de diversas redes sociales, sino que aseguran que valiente será aquél que quiera subirse a sus aviones.
Sin duda, la configuración de una imagen de marca lleva tiempo y su crecimiento está anclado a la confianza que el cliente o consumidor deposita en ella. No obstante, a la aerolínea le costará muy caro reconstruir su perdida reputación.
Al momento, la agencia rusa Interfax indicó que el Boeing 777 salió de Amsterdam, rumbo a Kuala Lumpur. Los informes de medios internacionales agregaron que el avión comenzó a descender unos 80 kilómetros antes de entrar al espacio aéreo ruso.
En tanto, la aerolínea dio a conocer a través de su cuenta de Twitter que perdieron contacto con el MH17 cuando éste volaba sobre Ucrania. A lo que la agencia Reuters agregó que el avión fue derribado por un misil en dicha zona, según aseguró el asesor del Ministerio del Interior Ucraniano.
El hashtag #MalaysiaAirlines es hasta ahora uno de los trending topics de dicha red social; tiene 86 mil 521 impresiones y 76 mil 526 cuentas alcanzadas, según datos de Tweetreach.
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