De nueva cuenta las salas del cine se han convertido en el escenario perfecto para promocionar un producto, tal y como lo hizo TiVo (tecnología que permite grabar el contenido de la televisión en un disco duro) que sorprendió a los asistentes de un complejo de Estados Unidos a quienes les “arruinó” su película.
Datos de Nielsen Scarborough, firma de investigación sobre de hábitos de consumo, hasta la primavera de este año, más de 113 millones de hogares estadounidenses tenían un sistema TiVo, lo que demuestra que es sumamente popular en aquel país.
Como parte de su marketing promocional, esta marca interrumpió una película justo en el momento del clímax, para transmitir un comercial, ocasionando que todos los presentes se enojaran e incluso hasta se levantaran de su asiento para ir a reclamar, sin embargo, segundos después de dicha acción apareció una persona para decir del por qué de la interrupción y como recompensa los invita una fiesta privada.
Con una activación divertida TiVo, dio a conocer su producto PERNO el cual permite a las personas saltar los segmentos de comerciales con tan sólo apretar un botón.