Estados Unidos.- Los términos del contrato se han mantenido reservados, pero algunos rumores dicen que la prestigiosa marca de relojes obtuvo la imágen de Tiger Woods por muchos menos millones de los que cobraba cuando estaba en la cima, antes de que el escándalo de su infidelidad dañara su imagen y lo dejara fuera de la escena deportiva.
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Antes de que sus problemas maritales se hicieran públicos y que admitiera ante la prensa que padecía de una adicción al sexo, Tiger Woods, perdió a sus patrocinadores más importantes, entre ellos Gatorade, Gillette y AT&T. El golfista había llegado a reportar ganancias de cerca de 90 millones de dólares al año gracias a sus acuerdos publicitarios.
Expertos en marketing se han sorprendido de que Wood haya regresado acompañado de una marca tan prestigiosa como Rolex, que está dirigida sin duda a un consumidor de alto perfil, sobretodo por que el deportista no ha ganado ningún torneo importante en los últimos dos años y por primera vez desde 1996 cayó del ranking de los 50 mejores jugadores de golf.
Ante esto las declaraciones de Rolex fueron muy claras: “Creemos que el Sr. Woods tiene una larga carrera por delante y posee todas las cualidades necesarias para seguir dictando la historia del golf”.
