En el marketing BTL, a diferencia de los exámenes del colegio, sí está permitido ver lo que está haciendo la competencia para asimilar y estudiar lo que está realizando bien, con la finalidad de poder tomar decisiones inteligentes y crear estrategias que tengan un mayor impacto. A este tipo de acciones se realizan en un punto de venta de los competidores se les conoce como store-check, grosso modo, término sobre el cual te platicaremos más en las siguientes líneas.
Si bien, hay sitios como BusinessCol.com que explica que el store-check consiste en una práctica por medio de la cual personal (interno o externo) de un punto de venta, o incluso los mismos fabricantes, visitan tiendas de la competencia para estudiar y analizar la disposición de la mercancía, tal y como ya lo comentábamos en el párrafo anterior, lo cierto es que esta definición resulta muy superficial.
Una definición más completa es la que nos ofrece Clau Consultors, medio que explica que el store-check es un modelo de apreciación, cuyo fin es el de evaluar la distribución y presencia de los productos en punto de venta o en el lineal. De acuerdo con este sitio, esta práctica resulta complementaria a actividades como el mistery shopper.
Ubicar y analizar los productos que hay en un lineal, tomando en cuenta elementos como su disposición, participación de marca, surtido, promoción son algunos de los principales objetivos con los que cuenta el store-check.
El estudio de los productos en los puntos de venta de la competencia no sólo se pueden realizar para un sólo producto, sino para todos los que conforman una tienda o una unidad estratégica de negocio (como lo sería, por ejemplo, una categoría en particular o un departamento).
Cabe destacar que el store-check no sólo consiste en analizar las estrategias de category management de los productos, sino que también busca contrastar y estudiar sus precios.
Una de las grandes utilidades con las que cuenta el store-check es que se pueden analizar, estudiar y asimilar las estrategias de distribución del producto que está ocupando la competencia para, como ya decíamos, se puedan crear campañas mucho más sofisticadas y que tengan un mejor impacto.
Acerca de su realización, Inbox sugiere que se pueden hacer una tabla con los distintos elementos que se evaluarán en los puntos de venta de la competencia, desde las marcas hasta el surtido, por mencionar algunos elementos. Posteriormente se seleccionarán las tiendas competidoras que se evaluarán periódicamente. Finalmente se puede llevar a cabo el estudio, el cual podría ser considerado como parte del benchmarking.
