Aunque se dice que solo el 1% de la población padece la patología conocida como Sinestesia, la realidad es que todos somos Sinestésicos en cierto grado.
¿Qué es la Sinestesia?
La asimilación conjunta o interferencia de varios tipos de sensaciones de diferentes sentidos en un mismo acto perceptivo es conocida como Sinestesia, del griego Syn ( junto) y aisthanestai ( percibir).
Se dice que in Sinestésico puede oír colores, ver sonidos, y percibir sensaciones gustativas al tocar un objeto.
Nuestros sentidos no trabajan en solitario, lo hacen en forma conjunta.
Confiamos en nuestro sentido de la vista para reconocer aromas, nos predisponemos a degustar sabores dependiendo del color y consistencia de los alimentos y podemos darle un nombre a las cosas dependiendo el sonido que se emite al pronunciarlo.
Cuando fundé Sensori K en 2012 los clientes difícilmente me entendían todo lo que se podía lograr por medio de Marketing Sensorial. Hoy en día algunos clientes me empiezan a pedir estrategias sinestésicas.
Las marcas se han dado cuenta de que combinar los sentidos es una herramienta muy poderosa. ¿Han entrado a algún restaurante y de tan solo ver el lugar pensar en que la comida estará rica? ¿Han llegado a una tienda en donde se perciben los productos como caros sin antes ver las etiquetas? Todo esto es un tipo de Sinestesia.
A veces con tan solo ver una botella de vino o de perfume podemos asumir si se trata de algo caro o barato. Lo mismo pasa al sentir el peso de un reloj o al tocar una prenda de vestir.
Lo que busca el marketing sensorial es despertar emociones por medio de los sentidos y a mayor número de sentidos utilizados más fácil crear dicha emoción.
Todos los elementos sensoriales deben de ser congruentes con lo que la marca busca comunicar.
Cuando se combinan correctamente varios sentidos para comunicar es cuando podemos lograr el impacto deseado en los clientes.