Los problemas alimenticios afectan cada vez más a poblaciones jóvenes. De acuerdo con datos del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), al menos 1 de cada 20 niñas menos uno de cada 20 niños menores a los 5 años pacede obesidad, mientras que uno de cada cada 8 sufre de desnutrición crónica. Como parte de la solución al problema, las instituciones legislativas mexicanas pusieron a discusión un nuevo reglamento para el etiquetado frontal en alimentos, legislación que ha sido aprobada por el Pleno del Senado de la República, de acuerdo con información de El Financiero.
Luego de haber sido aprobada por la Cámara de Diputados Federal el pasado primero de octubre, con 114 votos a favor, dos abstenciones y cero en contra, el Senado de la República avaló una serie de cambios en la Ley General de Salud, cuya finalidad es ofrecer un combate frontal a problemas nutricionales como la el sobrepeso, la obesidad y el etiquetado de alimentos.
A través de esta modificación a la ley realizada por el Senado, los alimentos deberán llevar en su cara frontal si tienen contenido alto en azúcares o en algunos otros tipos de componentes alimenticios, que puedan llegara perjudicar la salud de los consumidores, de este modo, se les brinda más información y con ello una mayor capacidad de decisión acerca de lo que comen.
Cabe destacar que las bebidas azucaradas tendrán una leyenda que explique que su consumo excesivo aumentar los riesgos de contraer padecimientos graves como, por ejemplo, enfermedades cardiovasculares, cáncer, obesidad y diabetes, tan sólo por mencionar algunas.
Según información de El Heraldo de México, México no es el primer país en la región en implementar el etiquetado frontal a alimentos y bebidas, sino que también ha sido usado en naciones como Chile, Perú y Brasil, donde a presentado una efectividad de 25 por ciento en la reducción del consumo de bebidas azucaradas.
Si bien es cierto que la medida aprobada por el Senado de la República ha sido vista por buenos ojos por la sociedad en general, lo cierto es que su implementación representa un reto para las estrategias de labelling de los productos, ya que claramente dichos anuncios restaran visibilidad a los diseños que se hagan, mientras que esto también obliga a mejorar el valor nutricional de los productos.
