Samsung prevé que habrá un estancamiento en su crecimiento dentro de mercados clave para la firma, esto ante las fluctuaciones en los tipos de cambio, además de políticas proteccionistas de algunos gobiernos.
El vicepresidente y co-CEO de la compañía surcoreana de electrónica, Kwon Oh-hyun, pidió a los empleados de la firma aprender de los errores y las crisis que enfrentaron durante 2016, en particular por la debacle provocada por el Galaxy Note 7, esto en su mensaje de inicio de año según reporta Bloomberg.
El año pasado, poco después de su lanzamiento, el Note 7 fue sujeto de críticas debido a que su batería se incendiaba.
La falla llevó a que Samsung descontinuara el producto y además solicitar a los propietarios reemplazar su producto por un S7 o S7 Edge.
Kwon Oh-hyun afirmó:
No debemos arriesgarnos incluso con el más pequeño de los problemas en la calidad de nuestros productos. Recuperemos nuestro orgullo mejorando nuestros procesos de manufactura y evaluaciones de seguridad.
El fiasco del Galaxy Note 7 le costó a Samsung alrededor de 6 mil millones de dólares y hundió las ganancias de la compañía a una baja histórica durante su tercer trimestre.
Los ingresos de Samsung en 2015 fueron de 177 mil millones de dólares, en tanto que su ingreso neto para ese mismo año fue de 16 mil millones de dólares.
El gasto en desarrollo en investigación de productos para la compañía fue de 12.6 mil millones de dólares en 2015, un gasto importante al considerar las fallas que presentó uno de sus productos estrella durante 2016.
