La empresa o negocio perfecto no existe, aunque esto no es sinónimo de no ser perfectible, es decir, que haya una mejora continua en sus distintas áreas.
Entre más grande es una corporación más compleja se vuelve su estructura, sus procesos… vaya, es más difícil tener control y organización sobre el recurso más importante de toda compañía: el personal.
Esto no significa que los negocios medianos o pequeños carezcan de problemas… ¡por el contrario!Generalmente carecen de formalidad en su estructura organizacional, descripciones de puesto,
contratos, etc.
Motivos por los cuales debo hacer una intervención en Desarrollo
Organizacional
1. Estructura organizacional precaria. No existe o no se respeta: el organigrama, reglamento interno, la filosofía organizacional (misión, visión, valores), así como la ausencia de descripción de puestos, ausencia en planes de capacitación para los empleados.
Quizá la organización en la que laboras sí puede contar con todo lo mencionado; sin embargo, no es garantía de estar bien hecho. Se pueden tener reglas absurdas, una filosofía colgada en la pared sin que los empleados la conozcan realmente… En fin, una estructura organizacional endeble que servirá de poco o nada.
2. Rotación de personal. Entendamos algo, la rotación es normal. La gente se puede ir de una organización por diferentes aspectos: jubilaciones (bajas inevitables), despidos (bajas necesarias), renuncias, o mejores oportunidades laborales (aspectos personales).
Algunos analistas sugieren que el índice de rotación ideal es entre el 1 % y 3 % anual. No obstante, si en la organización en la que trabajas constantemente están cambiando de personal es señal de una estructura interna dañada por lo que necesita una intervención urgente.
La rotación puede ser un indicio de que la empresa ya tiene hasta el gorro al personal por malos tratos, injusticias, falta de atención, exceso de trabajo, falta de respeto y de apoyo, pocas oportunidades de crecimiento. Creer que “nadie es indispensable” y que “alguien más los suplirá” es muy ingenuo en estos casos, pues el problema no es tapar ese hoyo que deja la vacante, sino tapar uno o varios hoyos profundos de la empresa.
¡La rotación de personal es un problemón!, ya que afecta aspectos como la imagen de la empresa, clima laboral y hasta asuntos económicos al tener que desprenderse de una lana por cada empleado que se va.
3. Ambiente laboral hostil. Ciertamente no se trata de ser amigo de todos los compañeros, aunque ello no está peleado con ser cortés. No obstante, vivir bajo la premisa de que mientras se traten con cordialidad aunque tengan diferencias entre compañeros es ponerle un parche a una herida sin haberla desinfectado.
Difícilmente se puede aislar el rol profesional del personal, el personal emergerá cuando esté saturado y tarde o temprano, aunque no haya peleas u ofensas, las actitudes y el ambiente se irán haciendo más pesados.
Las rencillas entre compañeros o departamentos/áreas merman la productividad por lo que la organización completa se ve afectada. Este tipo de clima laboral puede provocar una taza elevada en la rotación de personal.
4. Planeación a mediano y largo plazo. ¿En qué? ¡En todo! Adquisiciones de equipo, mejorar la infraestructura, destinar partidas para asuntos específicos de forma que se tiene capital ante una emergencia, planes de expansión de productos/servicios, nuevas sucursales, tener presencia en ciudades ajenas en donde radica la compañía, etc.
Vivir al día es vivir un crecimiento lento, y sin metas ni objetivos, sin sentido.
5. Centralización de las tareas. En algunos lados es común que sólo fulanito sabe ejecutar una tarea, sultanito es el único que sabe moverle a X máquina o usar Y software. Perenganito es el único autorizado para realizar ciertas tareas… De manera que si no están fulano, sutano o perengano, se crea una presión enorme al intentar marchar al mismo ritmo.
La solución de muchos es poner a otros empleados que no tienen idea del trabajo a atender esas áreas, además de atender el área que sí les compete. No se puede avanzar ya que son los únicos con el conocimiento.
Esto provoca retrasoss traducidos como pérdida de tiempo e incluso de lana. Craso error es dejar centralizadas algunas actividades. ¿Qué hará la organización el día que esas personas lleguen a faltar Posiblemente perder dinero y poner en riesgo varias ventas… ¿Qué se puede hacer al respecto? ¡Tener planes de formación para el personal! Esto es pensar a mediano y largo plazo.
6. Salarios y ventas. Sin ventas no hay lana y sin lana no hay para pagar la nómina. A pesar de que existen productos que bien podrían venderse solos como la Coca Cola, la firma invierte cantidades exorbitantes para publicidad y mercadotecnia porque entiende que el mercado es competitivo de manera que para estar en la cima debe mantener sus ventas e incluso mejorarlas.
Lo cual nos lleva a los salarios… cuando una organización no tiene salarios competitivos los empleados a la primera oportunidad que tengan se irán con el mejor postor.
¿Pero qué es un salario competitivo? Fácil, una retribución económica que compense la joda que exige el trabajo a fin de retribuirle y retener al talento humano.
7. Problemas de comunicación. Para que una organización tenga éxito es necesario que los integrantes jalen la cuerda para el mismo lado. Tanto empleados como jefes deben estar en el mismo canal; esto sólo se logra si la comunicación es eficaz.
¡Cuántos no tienen diferencias porque interpretaron de forma diferente un mensaje o porque unos
tienen el mensaje, pero otros ni siquiera están enterados! Puede ser que esté mal redactado o no se exprese verbalmente de forma adecuada… es más, puede ser que no se haya elegido bien el canal de
manera que no todos los empleados recibieron la información.
¡La comunicación organizacional eficaz es vital, le da cohesión a un equipo de trabajo!
Dr House, todos mienten
Pocas compañías son honestan para admitir que tienen broncas a su interior. Quién sabe, quizá algunos peces gordos piensen que están a toda máquina. A final de cuentas a quién le gusta admitir que tiene broncas gruesas al interior de su casa, ¡hasta vergonzoso es!
Me gustaría decir que no, pero en realidad sí… el Desarrollo Organizacional sí es la panacea para las broncas internas de las organizaciones ya que penetra hasta el tuétano, al mero esqueleto de las organizaciones. No pone un parche para tapar de manera momentánea la herida, hace cirugías milimétricas, precisas, sacando el pus desde el fondo.