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El día de ayer uno de los videos que se hicieron virales fue el de un cliente del banco Scotiabank, un adulto mayor de 91 años que fue víctima de un robo en su cuenta de débito por 355 mil pesos.
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Lo peor de todo es que las marcas se despiden del problema y dejan a los clientes varados en medio de las pérdidas económicas. Esto representa a todas luces una crisis para las instituciones bancarias, y generando una tremenda crisis pues la marca es ligada a un acontecimiento negativo.
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De acuerdo a estimaciones de PwC de 2018, la cifra de fraudes ha ido en crecimiento, en 13 por ciento, en los últimos años. Cifra que seguramente creció con la pandemia, esto como consecuencia debería derivar en mayores inversiones de los grupos empresariales y gobiernos por apaciguar este grave problema.
El día de ayer uno de los videos que se hicieron virales fue el de un cliente del banco Scotiabank, un adulto mayor de 91 años que fue víctima de un robo en su cuenta de débito por 355 mil pesos.
Según narran medios, en este fraude los realizadores contaban con los datos de usuarios y contraseña del cliente, pero con engaños hicieron pudieron obtener el token dinámico de la víctima. El video del cliente se hizo viral y rodó por las redes sociales.
A esta queja se sumaron varios clientes afectados bajo la misma dinámica, creando desde luego una crisis en la marca en la compañía bancaria, que se agudizó con la respuesta que la empresa dio a los clientes: “Estimado cliente. Le notificamos que se realizaron las acciones correspondientes para recuperar los recursos; sin embargo, no fue posible la recuperación. La investigación determinó que el fraude se derivó por compromiso de información a través de una llamada telefónica por parte del cliente, por lo que es importante mencionar que la guardia custodia del usuario, datos personales, contraseña y/o dispositivo llave son responsabilidad del cliente”.
Es decir en situaciones de fraudes como esta el cliente está solo y las marcas se deslindan de lo acontecido.
#Video ? Adulto mayor, víctima de llamada falsa de su banco: le roban ¡355 mil pesos! https://t.co/yyVg6xgehY pic.twitter.com/c2s0u9ltlC
— El Universal (@El_Universal_Mx) October 28, 2020
Papel de las marcas ante fraudes
Lo peor de todo es que las marcas se despiden del problema y dejan a los clientes varados en medio de las pérdidas económicas. Esto representa a todas luces una crisis para las instituciones bancarias, y generando una tremenda crisis pues la marca es ligada a un acontecimiento negativo, que al final termina dañando la labor y la imagen de las instituciones involucradas.
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Tenemos que aceptar vivimos en una especie de burbuja digital que parece fácilmente romperse con este tipo de acciones que vulneran a los consumidores, pues son ellos quienes se ven mas afectados. Esto puede derivar en una tormenta perfecta para las entidades bancarias, pues ahora atraviesan por una profunda crisis,, México es uno de los países que menor banca digital y ahora es cuando las marcas deben apostar por hacer sentir seguros a sus consumidores.
De acuerdo a estimaciones de PwC de 2018, la cifra de fraudes ha ido en crecimiento, en 13 por ciento, en los últimos años. Cifra que seguramente creció con la pandemia, esto como consecuencia debería derivar en mayores inversiones de los grupos empresariales y gobiernos por apaciguar este grave problema.
