En México, el turismo es uno de los sectores con mayor aportación al Producto Interno Bruto (PIB). En 2018, el sector aportó 17.2 por ciento al PIB nacional, alrededor de 209 millones de dólares, según datos del Consejo Mundial del Viaje y el Turismo (WTTC).
Luego del cierre del Consejo de Promoción Turística de México (CPTM), al considerarse que otras instancias cumplen con la misma función, diversos organismos han señalado que el turismo requiere de una estrategia de promoción turística nacional e internacional, con la finalidad de que se genere una mayor captación de turistas.
El Consejo de Promoción Turística de México (CPTM) era el organismo encargado de promover, planear y difundir los destinos turísticos del país, financiado por recursos de la llegada de extranjeros al país.
Pero la captación de turistas no es el único reto que enfrenta el sector en México. Según la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco- Servytur), el desarrollo del turismo mexicano enfrenta desafíos desde la infraestructura, promoción, la ampliación de la oferta de destinos hasta la seguridad en los estados como factores para que el sector se sostenga como motor de la economía.
Uno de los retos más grandes es la inseguridad. De acuerdo con el Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal, México cuenta con 15 de las ciudades más peligrosas del mundo, donde sobresalen: Tijuana, Ciudad Juárez, Acapulco e Irapuato.
El Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024 de Presidencia de la República muestra que el Tren Maya es “el proyecto más importante de infraestructura, desarrollo socioeconómico y turismo del presente sexenio”. Su principal objetivo es el incremento del turismo en la Península de Yucatán, así como crear empleos e impulsar el desarrollo sostenible.
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