Hoy día, las marcas centran sus esfuerzos en conseguir el mayor número de usuarios posibles en Internet, pues saben que es ahí donde habita su target.
Para ello organizan disímiles acciones con tal de atraer la atención de los cibernautas. Una de estas estrategias fue creada por la agencia Dorst & Lesser para la compañía automotriz Renault.
El objetivo de la acción era aumentar el número de likes en la página de Facebook de la marca, pero también saber de qué iba la interacción con los seguidores de la firma. Así que decidieron usar la red social y una instalación offline que comprobará el tamaño de las emociones producidas por los autos.
La agencia construyó una especie de balanza, de un lado colocó un auto real y del otro un contenedor que sirvió para “depositar” todos los likes de Facebook de forma real. La intención era levantar el carro gracias al peso ejercido por las “manitas arriba”. Después de dos semanas y más de 16 mil pulgares se logró el objetivo.
La campaña consiguió 12 mil nuevos fans y cerca de 60 mil visitas durante la transmisión del momento final de la estrategia.
