La obtención de datos para conocer aún más sobre los hábitos de consumo de los clientes es, al día de hoy, uno de los objetivos primordiales de la gran mayoría de las marcas, esto con la finalidad de crear campañas de mayor impacto, mejor segmentadas y con los mensajes correctos. Para esto, la aplicación del crowdsourcing es una forma conveniente para conseguirlo.
En términos generales, el crowdsourcing se define como aquella estrategia a través de la cual un fabricante obtiene datos de sus consumidores, esto gracias al lanzamiento de promociones o convocatorias a determinado target que deberá llevar a cabo una serie de misiones que lo harán acreedor a recompensas o incentivos.
Regularmente para la ejecución de dicha estrategia las marcas recurren al desarrollo de aplicaciones móviles que, al ser descargadas por los consumidores, de manera gratuita, reciben una serie de indicaciones a realizar, entre las que destacan exhibición de sus productos en anaquel, malas y buenas prácticas de los competidores, verificación de precios y promociones, así como la adecuada ejecución de acciones de marketing en punto de venta.
Ventajas que recibe una marca al implementar crowdsourcing
Independientemente de la estrategia usada para la recopilación de datos, se sabe que actualmente recabar información clave del público meta es vital no solo para la generación de nuevas campañas de marketing que serán llevadas a cabo tanto en medios digitales como en tradicionales y dentro de tiendas físicas, sino que además favorece la creación de productos que habrá de satisfacer las necesidades del consumidor.
En el tema de crowdsourcing, hay varios beneficios y ventajas que éste brinda a las marcas, entre los que destacan los siguientes:
- Les permite disponer de un gran número de personas, dispuestas a recabar datos, a cambio de ciertas recompensas, lo cual ayuda a prescindir de otras acciones de marketing como promotoría.
- La información se obtiene con una inversión menor, esto en términos de desplazamiento o contrataciones de personal.
- Favorece la obtención de datos clave en tiempo real.
Pese a los beneficios que da a los fabricantes, el crowdsourcing también cuenta con ciertos contras o desventajas.
Al tratarse de un grupo de personas no experto en el levantamiento de información, ésta no se presenta con un análisis previo, lo cual le ocupará tiempo a la marca para depurar los datos.
Otra desventaja es que los participantes no guardan relación comercial con el retailer, lo cual les impide acceder a las bodegas, así como a los sistemas de inventarios, situación que deriva en una falta de información relevante.