Por: Paco Santamaría
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El domingo pasado fui al cine con mi novia a Plaza Antara, aquí en Polanco, en el DF. Y pasó algo que me sorprendió más que la aburrida película, en la que hice trabajos para no cabecear mucho. Justo en el lobby y antes de entrar a la taquilla, vi mucha gente aglomerando observando muy interesados algo que estaba pasando.
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No es un secreto que México’s Next Top Model ya llegó desde hace mucho tiempo a la programación de paga en la audiencia mexicana. El formato muchos lo conocemos y es responder la necesidad de: “Quiero ser modelo y quiero ser famosa”.
La fórmula es perfecta , aspiracional, integradora de la audiencia y formadora de estilo de vida. Si bien, tiene mucho éxito y mucho de qué hablar, lo que más me sorprendió ahora, es que el sentido común con el que activaron una muy buena idea. Se plantaron en un centro de moda, una plaza comercial como Antara. Un centro de moda y de tráfico de gente que ama la moda. Y ¿por qué no hacer el mismo casting ahí un domingo de mucho flujo de gente?
La activación, por lo que vi, resultó perfecta. Mucha gente observando el casting, y al verlo en vivo, la gente se siente integrada el programa y al proyecto, seguro sintonizarán el canal para ver si su preferida quedó seleccionada. Así generarán tráfico de audiencia. La plaza comercial también sale beneficiada, porque genera experiencias relevantes para quienes van un domingo.
El canal y el formato del programa, prácticamente salen a la calle para hacer partícipes de su proyecto a todos los que lo vean. Una activación sencilla, con sentido común y una buena idea efectiva. Las experiencias importantes están más visibles y más casuales de lo que parecen, el trabajo de quienes hacemos BTL, es simplemente observar y ajustar las cosas en el lugar indicado, en el momento adecuado. Así de simple como parece.