A diferencia de lo que muchas personas creen, cuando se quiere poner un negocio (sea este un local de alimentos o un retailer), no basta con simplemente montar todo en cualquier lugar y esperar a que los clientes lleguen. Para poner cualquier establecimiento, hay que tomar en cuenta una serie importante de consideraciones previas, en función del tipo con el que se quiere trabajar. Un caso muy específico es el del centro de consumo. ¿Qué es lo que se debe considerar previamente antes de montar uno de estos espacios?
Cuando se trabaja con alimentos regularmente se requieren ciertos lineamientos de sanidad, como contar con tarjas y con tomas de agua. Es importante revisar que el espacio en el que se vaya a colocar el centro de consumo cuente con este tipo de aditamento. Adicionalmente, es importante revisar la ley para verificar qué otras características debe tener el local para que esté dentro de los márgenes de la ley (por ejemplo, el uso de suelo necesitado).
Depende mucho de qué se vaya a servir, pero en el caso de que se preparen alimentos, es importante verificar que el local en donde se quiere poner el centro de consumo tenga tomas de gas (las cuales funcionen de acuerdo a la ley local). En el caso de que en dicho espacio se vayan a servir bebidas alcohólicas, se necesita solicitar los permisos pertinentes para vender este tipo de productos.
Desde el punto de vista propiamente mercadológico, es importante revisar que el espacio en el que se va a colocar el centro de consumo esté cerca de donde se encuentra el público meta al que quiere llegar.
Además de lo anterior, no basta con que el establecimiento se encuentre en un lugar muy concurrido o esté a la vista de todos, también hay que verificar si lo que ofrecemos satisface la demanda de los clientes o ya está siendo cubierto por otros locales.