En la actualidad los clientes quieren tener lo que necesitan o quieren en el instante en el que lo desean, sin mucho esfuerzo y sin largos tiempos de espera. El e-commerce ha solucionado parte del problema, puesto que las personas ahora son capaces de comprar por medio de su computadora o a través de sus dispositivos móviles con tan sólo un clic. Sin embargo, el comercio electrónico ha seguido evolucionado y se ha adaptado a los nuevos retos de la industria. De este modo ha surgido una nueva tendencia: el i-commerce.
Sin embargo, ¿qué significa i-commerce (instant commerce, por sus siglas en inglés)? De acuerdo con portales como M 4 Business y Bloggin Zenith, este concepto se puede traducir como comercio instantáneo y se entiende como el proceso de venta de productos por medio de las redes sociales, con la particularidad de que la transacción se lleva a cabo sólo por este canal, sin la necesidad de tener que mandar al cliente a un sitio web o a alguna aplicación.
Con la finalidad de que las personas pasan grandes cantidades de tiempo en las redes sociales, el i-commerce aprovecha esto para agilizar el proceso de compra y que los clientes puedan adquirir los productos que están en una fan page sin necesidad de tener que salir de esta, lo cual implica no sólo más tiempo, sino también un esfuerzo (por mínimo que éste sea) mucho menor.
Aunque espacios como Facebook ya ofrecen las herramientas para hacer una especie de tienda en línea dentro de la red social, lo cierto que un modo sencillo de hacerlo es por medio de fotos a las cuales se les coloca el precio; el cliente se comunica por medio de un mensaje directo, lo solicita y posteriormente lo recibe.
Cabe destacar que el i-commerce es considerado como una evolución natural del e-commerce, por lo que se considera que esta tendencia está ganando mucho terreno.