Una herramienta que utilizan las marcas para persuadir las decisiones de compra del consumidor con el objetivo de aumentar las ventas de un producto específico es el Efecto Señuelo.
El Efecto Señuelo
De tal manera, el Efecto Señuelo o también llamado Decoy Effect se produce cuando se introduce una opción con el objetivo de decantar la elección del usuario hacia la opción que más interesa a la marca.
Por ejemplo, ante esta oferta los consumidores seguramente no seleccionarían la opción más barata, ¿por qué? no se debe a su capacidad adquisitiva, sino de su percepción.
Es así de simple, por un coste poco mayor la idea que tiene el consumidor es que obtendrá un valor más grande, por ejemplo, una carne extra.
A continuación podrás notar cómo son varios los retailers que hacen uso de esta técnica. Colocan una opción poco favorable con menos valor que las demás opciones para destacar la que les interese vender.
De esta manera, la presentación de los productos y sus precios provocan cambios en la preferencias de los consumidores. Por lo tanto, cuando se presente una tercera opción (el señuelo) que resulta inferior en todos los aspectos respecto a las otras dos opciones, esta incrementa la preferencia de la opción que requiere llamar la atención del shopper.
Asimismo, la colocación de la tercera opción hace que los consumidores la eviten ya que por solo un ligero costo se puede obtener una opción que ofrece más valor y beneficios.
A propósito, esta es una forma de evidenciar que los consumidores a menudo toman decisiones de compra sin tener en cuenta toda la información sobre un determinado producto. Ocasionando que los retailers diseñen sus estrategias de marketing y de fijación de precios en base a información que solo va a incrementar sus márgenes de ventas.