De acuerdo con Bernard Roth, uno de los “inventores” del término, Design Thinking o Pensamiento de Diseño es un conjunto de prácticas generales efectivo para resolver retos de diseño y se aplica para cualquier tipo de producto o experiencia.
El concepto en sí es amorfo, su nombre viene de David Kelley (profesor de la Universidad de Stanford) que intentó explicar que los diseñadores exitosos tenían una mentalidad y enfoque diferente al común de las personas.
El Design Thinking o Pensamiento de Diseño se rige bajo cinco principios básicos:
1.- Empatizar
Cuando diseñas lo haces basado en las necesidades de los demás. Es decir, la preocupación principal es la experiencia del usuario, por lo que es necesario investigar qué le gusta, qué le molesta, las cosas que lo hacen disfrutar, cuáles son sus problemas. Es el principio de toda acción que tenga como objetivo cautivar a tu consumidor o cliente.
2.- Definir el problema
¿Cuál es la necesidad del usuario? Ya identificado eso, podrás comenzar el proceso creativo para poder ejecutar una idea que cumpla con sus expectativas y logre el objetivo de marca. La idea es preguntarte qué es importante para el target, no sólo para la marca. Si los KPIs de la marca incluye a las necesidades y gustos del cliente o prospecto, entonces podemos tener más éxito en la ejecución de la experiencia.
3.- Idear una solución
Para generar soluciones necesitas ideas, para obtener ideas, requerirás de diferentes técnicas par obtenerlas. Ejemplo: lluvia de ideas o brainstorm, mapas mentales, bocetos. Por ejemplo, en una reunión que tuvimos en la compañía, se citó a los directivos donde en una dinámica muy ágil, dimos nuestra opinión sobre un tema relacionado. Tres opciones: Like, Dislike, Enhancement. Con papelitos fuimos dejando en cada urna nuestras ideas y al final pudimos identificar necesidades y mejoras. Un ejercicio muy util que no debe llevarte más de una hora.
4.- Hacer prototipos
Es muy complicado hacer la activación, el stand o la experiencia de manera perfecta. Sin embargo, para ejecutar acciones BTL de gran nivel, existieron y existirán muchos errores y problemas en el camino. Aprende de ellos, ya que sin duda son indispensables para crecer e intentar llegar a esa perfecta ejecución. Un buen consejo es construir tu proyecto a escala, desarrollar planos o practicar tu ejecución varias veces antes de mostrarlo al público meta.
5.- Obtener feedback
Es de suma importancia siempre estar cerca del target, ya que ellos serán los mejores jueces de tus acciones. Siempre implementa un mecanismo de retroalimentación: encuesta de satisfacción rápida, buzón de comentarios, una app para que dejen su punto de vista.
Lo que hace Vips en sus restaurantes es un ejemplo de ello. En las cajas se encuentra de manera electrónica una encuesta de satisfacción que usa emojis. Una forma muy sencilla de calificar la comida y el servicio.
El propio Roth, como lo explica en su libro The Achievement Habit, pone en aviso que los principios del Design Thinking no deben seguirse en ese orden, sino que puedes saltar entre pasos o comenzar por el final. El fracaso es parte de este esfuerzo, por lo que puedes recomenzar la idea desde una reclamación o el feedback de la gente que despreció tu producto o experiencia por primera vez.
El fracaso nos lleva al éxito, por lo que la clave es actuar. La idea principal del Design Thinking es que después de un fracaso, aprendas algo y pienses en la solución. De esa manera se repite el ciclo de manera constante e interminable.
Uno de los objetivos primordiales del Design Thinking es mejorar procesos y encontrar soluciones a los problemas en sus negocios.
Puedes fracasar las veces que quieras, más no rendirte, ¿estás preparado?