Hace unos días, tanto PRD como el PAN, ambos partidos políticos, hicieron oficial su alianza para los próximos comicios de 2018, una relación que no sorprendió del todo.
Lo interesante de esta unión es que pareciera que para hacer una alianza lo único realmente importante es ser de la misma industria o sector, y buscar a toda costa un beneficio individual, el cual se obtiene a costa de terceros, algo que en este país es frecuente y obvio, sin el mínimo grado de ética.
Ese tipo de alianzas sí traen beneficios para ambos partidos, pero olvidan algo importante: su imagen, algo de lo que no pueden prescindir pero que parece no importar en absoluto.
Sin embargo, en la industria del marketing, las marcas sí trabajan en el cuidado de su imagen y cómo la muestran ante sus consumidores. Es por esto que cada que se alían con partners siempre se busca un fortalecimiento de imagen y un ganar-ganar.
Entonces qué es aquello que podría definir una buena relación B2B para que todos los involucrados salgan beneficiados, y no se conciba una alianza sin ética, como sucede en la política nacional.
Atender a un mercado similar
Quizá se trate de una marca que vende autos y desee aliarse con otra compañía que no venda autos. ¿Cuál sería una buena opción? un banco o una aseguradora, ya que a pesar de vender productos y/o servicios diferentes, sí se enfocan en un target similar, y tanto una como la otra empresa se complementan.
No tener mala reputación o imagen negativa
En el caso de los partidos políticos no hay mucho que hacer ante la mala imagen que se han empeñado en mostrar y reafirmar, pero cuando se trata de marcas, lo ideal es aliarse con brands de gran prestigio, que sea del gusto de la gente, y que este envuelta en escándalos internos, con su consumidor o bajó la lupa de miles de usuarios en social media tras una mala campaña.
Fomentar un ganar-ganar
Este tipo de relaciones siempre debe buscar un ganar-ganar para que los beneficios se disfruten por ambas marcas, y al mismo tiempo hacer que gane el consumidor también.
Aquí, las promociones cruzadas, por ejemplo, son una buena forma de mostrar un ganar-ganar, ya que mientras se adquiere un producto o servicio, se motiva la compra de otro.