Las bases de datos son el corazón del marketing directo. Sin dichos registros es prácticamente imposible poder realizar campañas de emailing, telemarketing o cualquier otra que pertenezca a dicho canal. Por este motivo son muy importante, sin embargo, antes de realizar uno de estos documentos es necesario tomar en cuenta algunos aspectos, no sólo para que la data que se obtenga sea útil, sino para que también para que no incumpla ninguna ley.
Hay que recordar que recientemente, en 2018 se aprobó el Nuevo Reglamento de Protección de Datos Personales de la Unión Europea, el cual ha servido como referencia en distintos países del mundo, para que adecuaran sus leyes, como es el caso de México, el cual buscó hacerlo por medio del Convenio 108.
¿Qué implica esto? Que ahora las empresas que trabajen con datos debe ofrecer información más clara sobre qué si se va a recabar los datos de las personas (para lo cual, las compañías necesitan consentimiento explícito de los usuarios). También es necesario especificar qué es lo que se realizará con esa información.
Con esto como antecedente, cabe destacar que es necesario ser claros con los avisos de privacidad y de uso que se colocan en los sitios, para evitar cualquier inconveniente. También es necesario que conseguir el consentimiento de cada uno de los usuarios con cuyos datos se trabajará. Esto tiene la finalidad de evitar la mayor cantidad de problemas legales que pudieran surgir.
Otro aspecto más técnico que debe considerarse al momento de trabajar con bases de datos es que se debe verificar siempre que se pueda que la información que se utiliza no sólo sea veraz y que esté actualizada, con la finalidad de que, al usarla, nos ofrezca los resultados apropiados.
También es necesario verificar que la información nueva que se está integrando a la base de datos no esté repetida, ya que esto podría provocar algunos problemas en los resultados que se obtendrían.
