Como parte de las acciones de marketing que marcas emplean durante el año, la publicidad exterior es una de las más usadas a la fecha.
Aun cuando varias empresas han migrado su contenido y esfuerzos hacia plataformas digitales, la preferencia por usar OOH o DOOH para elevar su presencia entre los consumidores se mantiene.
Tan solo en 2017, la inversión destinada a publicidad exterior en México llegó a los 7,215 millones de pesos, de acuerdo con datos del Departamento de Investigación de InformaBTL.
Dado que se trata de formatos que están disponibles 24/7, ubicados en espacios públicos y de alto tránsito de personas, además de comunicar concretamente un mensaje, varias empresas no han prescindido de este tipo de acción mercadológica.
Y ante la búsqueda de estar en todo momento presentes para sus consumidores, algunas empresas suelen utilizar diversos espacios y formatos en una sola ciudad para así ganar presencia frente a su competencia.
Vallas y espectaculares, los menos regulados en la CDMX
De acuerdo con estadísticas presentadas por la Fundación por el Rescate y Recuperación del Paisaje Urbano (FRRPU), en la capital del país existen alrededor de 8,000 vallas y tapiales, de los cuales asegura que el 90 por ciento de ellos no están regulados, además de que muchos de estos se agrupan como anuncios volumétricos, hecho que la Ley de Publicidad Exterior de la Ciudad de México prohíbe.
De igual forma, los formatos tipo espectacular no solo han crecido en la CDMX, sino que además muchos de ellos funcionan sin los permisos establecidos por ley.
Según la FRRPU, el padrón que tiene el Gobierno de la Ciudad de México registra un total de 4,160 anuncios espectaculares y muros, de los cuales han sido retirados cerca de 500 por no presentar los lineamientos adecuados. Sin embargo, esta misma fundación también señala que, además de los poco más de 3,600 anuncios que deberían estar visibles en la capital del país, ha habido la colocación ilegal de aproximadamente 4,000 más.