Comprender cómo funciona la percepción del cliente es una de las tareas más importantes que deben aprender los especialistas de marketing BTL en la actualidad. ¿De qué modo las estrategias que se están generando en las agencias o en los departamentos de mercadotecnia de las empresas son asimiladas y comprendidas por la gente? Este tema adquiere una relevancia muy grande en el visual merchandising, especialmente en lo que tienen que ver con el escaparate.
Las formas, la iluminación, la composición son sólo algunos de los muchos factores que influyen en la percepción que el cliente tiene del escaparate para que resulte atrayente y llamativo, que son importantes considerar, de acuerdo con el portal de información del Ayuntamiento de Telde, porque este espacio es un elemento vendedor que genera un impacto las 24 horas del día.
De acuerdo con datos de El Aula del Escaparate, la percepción que tenga un cliente potencial de este espacio variará dependiendo si lo mira mientras está en movimiento o estático frente a él, puesto que se tendrá una visión diferente de este espacio.
Imaginemos que estamos parados frente a un escaparate. Las zonas que tendrán mayor impacto visual son (vistas de modo horizontal) la parte central y baja de este espacio, mientras que la más alta será la que menos llame la atención de la gente.
Ahora pensemos que estamos caminando sobre una banqueta en dirección paralela hacia un escaparate. Las zonas que llaman más la atención se modifica. Vistas de modo vertical, la más próxima al cliente es la que menos atención recibirá (puesto que estará posiblemente tapada por un muro), mientras que la del centro y la del extremo serán las más llamativas.
El visual merchandising se ha apoyado en las leyes de la psicología de la Gestalt para hacer escaparates más llamativos, que sean capaces de ser mejor percibidos por el cliente, tal y como explica Escaparate al mundo.
Algunas de las leyes que destacan en el montaje del escaparate es la de cierre, la cual explica que las personas tienden completar mentalmente las imágenes que se muestran parciales. Si en ese espacio del punto de venta se hay figuras incompletas, esto llamará mucho la atención de la gente.
Otra de las leyes que utiliza es la de la proximidad, que hace referencia propiamente a la composición de los elementos que conforman un escaparate. La cercanía que tienen unos con otros ayudarán a destacar ciertos elementos. Por ejemplo, si juntamos tres relojes de un lado y ponemos un cuarto separado, éste último será el que destaque más.