Ya no es cosa nueva que la Mercadotecnia es un animal adaptable a nuestras circunstancias. A cada momento de nuestra vida.
Más artículos de Paco Santamaría:
Las vacas flacas y las vacas gordas en el universo del BTL y de la vida
Las tribus efímeras se agrupan en flashmobs
Hoy las ciudades marcan los destinos laborales de nuestras vidas. Es por eso que debemos entender a la perfección lo que pasa dentro de ellas, sus circunstancias y dinámica. Cuando hacemos Mercadotecnia en las grandes ciudades, no es cosa de ir contra corriente, al contrario, debemos de sumarnos a su inercia.
Por ello, la palabra proximidad estará muy constante en nuestro universo como tendencia en estos nuevos tiempos. Los clientes siempre se van a inclinar por lo que les queda próximo, cerca de ellos. Si van a comer a un restaurante lo harán en función de cuánto tráfico les implica ese esfuerzo. Si tienen que caminar o no para llegar.
La ley del mínimo esfuerzo gobernará el comportamiento de compra de los clientes que habitan las grandes ciudades. El razonamiento implica: Compro, si me queda cerca y es un lugar próximo a mi. Buscaré destinos en mi zona para divertirme, hacer deporte y trabajar. La proximidad se apoderará de las mentes y corazones en proporción del crecimiento poblacional de las grandes ciudades y urbes. Y como agentes de la Mercadotecnia debemos de entender esto. No pretender aplicar métodos universales genéricos en una realidad zonal y de universos próximos. Para grandes necesidades, es necesario aplicar acciones locales. Esta simplicidad nos ahorrará tiempo, presupuestos y esfuerzo. Piensa de forma local y llegaras a conquistar al mundo entero.