El regreso a clases es una temporada donde se debe fomentar el consumo responsable y sostenible para cuidar la economía familiar. Pero más allá de las compras escolares, es importante que como consumidores conozcamos nuestros derechos, porque de esta manera es posible realizar compras informadas y planeadas, con la finalidad de elegir productos con la mejor calidad y precio.
Los útiles escolares cambian según el grado escolar, pero en cierto modo es un hecho que algunos materiales resultan tener costos más altos y que afectan la canasta básica familiar. Una recomendación de la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO), es que de preferencia se adquieran los útiles escolares por mayoreo, ya que de esta manera se ahorra y se cuenta con más materiales si el niño requiere adquirir alguno durante el ciclo escolar.
En el ciclo escolar 2018-2019, se estima que la derrama económica generada por el regreso a clases fue más de 79 mil millones de pesos en útiles, uniformes, calzado, libros y demás artículos escolares, según la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco-Servytur).
Datos de la Confederación indican que, cada uno de los 25 millones de estudiantes de preescolar, primaria y secundaria realizaron un consumo promedio de tres mil pesos, pero se registró un incremento del 40 por ciento por la adquisición de artículos electrónicos como computadoras, tabletas y calculadoras.
Por tanto, es importante realizar una búsqueda de opciones para realizar la mejor compra de útiles escolares. De acuerdo con una encuesta realizada por Kantar Worldpanel, las acciones que toma el consumidor para afrontar los gastos por el regreso a clases van desde reutilizar útiles del año pasado (33 por ciento), aprovechar promociones de supermercados (27 por ciento), cambiar el lugar de compra con el objetivo de ahorrar (14 por ciento), comprar a crédito (12 por ciento) y realizar compras al por mayor para gastar menos (9 por ciento).
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