Diputados presentan iniciativa en la que proponen regular comercialización de la copa menstrual. La diputada del partido Movimiento Ciudadano, Verónica Delgadillo García, presentó ante el Pleno de la Cámara de Diputados una iniciativa para reformar la Ley General de Salud, a fin de contar con una mejor clasificación de los productos para la higiene personal y permitir el uso de la copa menstrual, misma que pretende hacer una distinción entre los productos para la higiene personal y los que son considerados como medicamentos.
Este producto de higiene personal es un recipiente que se inserta en la vagina durante la menstruación para depositar el flujo menstrual que, a diferencia de los tampones, que también se usan internamente, la copa menstrual no absorbe la sangre; ésta queda contenida en el interior de la copa hasta que se extrae de la vagina y se desecha el líquido.
Los tres materiales usados para su producción son goma o látex, silicona y plástico quirúrgico; es reutilizable y tiene una vida útil de hasta 10 años, la cual dependerá del uso y mantenimiento que se le dé.
También establece que en los casos en los cuales los insumos de estos productos tengan variaciones en el material con el que están elaborados o en su concentración deberán ser aceptados en la práctica médica, y su seguridad y eficacia deberán estar comprobadas.
Asimismo los diputados solicitan que se defina el periodo adecuado que debe permanecer en el organismo, considerándose periodos de uso.
En febrero de este año, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), emitió una alerta sanitaria contra la copa menstrual, en la que recomendó a la población no adquirir ni utilizar dicho producto, ya que no cuenta con registro sanitario en México, además de que en México no existe información suficiente sobre su calidad y seguridad, así como de evidencia científica que avale su utilización.
¿Qué cuesta más?
Para informar a las mujeres sobre esta opción para su ciclo menstrual, la diputada Delgadillo García señaló que es necesaria una campaña informativa que hable de las ventajas que tiene el uso de la copa menstrual, en materia ambiental, de salud y económica.
El costo aproximado de este producto oscila entre 350 y 700 pesos, y puede durar hasta 10 años. Esto indica que su costo, respecto al de toallas sanitarias o tampones es mayor, pero se compensa con su durabilidad.
Y aunque algunos pensarían que el uso de una copa menstrual es reciente, la realidad es otra. El primer prototipo data de 1870, pero nunca figuró en el mercado.
En 1937, la actriz estadounidense Leona Chalmers patentó la primera copa menstrual como la conocemos hoy, pero la Segunda Guerra Mundial generó una escasez de caucho y la empresa detuvo su producción.
Entre 1950 y 1970 algunas empresas estadounidenses intentaron vender este producto pero nunca tuvo el éxito deseado, los registros indican que las mujeres se incomodaban con la idea de vaciar una copa llena de sangre y lavarla. En los años 80 se revivió la producción y continuó hasta la fecha.
Si se ha pensado en adquirir una copa menstrual, estas son 7 recomendaciones de uso para no afectar tu salud:
- Lavarse las manos con agua y jabón neutro cada que se use.
- No usarla más de 12 horas.
- Desinfectar la copa después de cada uso y hervirla por 10 minutos después de cada periodo menstrual.
- Buscar el tamaño de la copa según la cantidad de flujo.
- Guardarla en un recipiente exclusivo y no exponerla al sol.
- Se recomienda usarla sólo si ya se tienen relaciones sexuales, pues al colocarla puede haber cierto traumatismo.
- Acudir con un médico para que explique su forma de uso.