Me he dado cuenta de una cosa muy importante: Los clientes ya están hartos y saturados. 2013 fue un año que quienes les fue bien, les costó mucho llegar a sus objetivos. Entonces noto un entorno y una sensación de hartazgo.
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Pero no todo está mal en el horizonte: como muchos casos, cada crisis es una oportunidad. Por lo mismo y como veo venir un año pesado, en donde requeriremos un esfuerzo doble y los clientes nos pedirán más resultados en el menor tiempo posible, noto una tendencia clara: tenemos que divertirnos y enseñar a que nuestros clientes se diviertan con su trabajo.
Después de todo, estamos en esta vida para vivir y divertirnos. Es así como detecté la comunicación orgánica que se está generando en las mentes de nuestros clientes y si así les quieren llamar, consumidores.
Al existir un entorno de reto, competencia, estrés y saturación de mensajes, fluirán mejor los mensajes positivos, espontáneos y naturales. Así es, la tendencia es que no hay tendencia.
Que sólo ejerceremos en nuestras activaciones y tácticas de mercadotecnia la función de ser unos facilitadores de mensajes positivos. Que sólo seremos unos contribuyentes de buena vibra. Dejaremos que el mercado y los clientes se entiendan solos. Esa es la receta, que no hay receta.
Y para muestra basta un botón, aquí un ejemplo de iniciativas que están haciendo los clientes con tanta hambre de comunicación efectiva orgánica y positiva. Los invito a ver el siguiente video producido por los que podrían ser sus clientes. Cuándo entenderemos que nuestros mejores publirrelacionistas son nuestros clientes si es que los sabemos atrapar.