Te has preguntado alguna vez ¿por qué el Dr. Simi tiene más branding que otra farmacia? Por difícil de creer mucho tiene que ver su estrategia basada en el uso de botargas.
Antes las marcas solían poner a un gío a ejecutar una estrategia de sampling en un lugar concurrido o a un botarguero en un semáforo que se movía graciosamente para llamar la atención de los transeúntes. Ahora los mercadólogos, si bien no dejan de hacer sampling ni de colocar botargas, pero esto ya lo anclan a una estrategia integral.
Sin afán de contradecir a los líderes de la industria que consideran que el uso de botargas para cautivar a la audiencia puede considerarse parte de un below the line viejo, al no propiciar experiencias memorables a la gente, sí damos por hecho que en ocasiones lo importante no es la botarga sino lo que se logra hacer con ella en un evento de marca, en una promoción, en una activación o en el punto de venta a través de un espectáculo con botargueros que posteriormente puede amplificarse en otros soportes de comunicación.
Es por ello que el Dr. Simi o las vacas de Alpura se esmeran por bailar y protagonizar videos en YouTube, pues su encanto no está en su aparente simpleza o en demostrar si se trata de una buena o mala marca, está en la posibilidad de que la marca se coloque en el top of mind de la audiencia, pues no hay que dejar de lado que un show que se desprende de una buena estrategia de marketing siempre será recordado por la gente, y esa es precisamente una de las premisas del below the line: establecer puntos de contacto para luego construir branding.