En ocasiones anteriores tuvimos la oportunidad de platicar sobre los la ética en los negocios y por qué es tan importante. Cuando una empresa o sus colaboradores no cuenta con los valores mínimos, esto puede generar problemas, principalmente en sus relaciones públicas exteriores. Pero la imagen que proyectan no sólo será negativa para con shopper y el consumidor, sino también en sus socios comerciales, como sus distribuidores. Un ejemplo muy importante es la empresa española cárnica El Pozo, la cual ha dejado de ser distribuidas en las dos principales cadenas de supermercados de Bélgica por causa de las denuncias de maltrato animal con las que cuenta, de acuerdo con datos de El País.
De acuerdo con datos de El Mundo, las cadenas de supermercados que sacaron de sus almacenes los productos son Colruyt y Delhaize a raíz de las acusaciones contra El Pozo de maltrato animal causadas por las imágenes que se transmitieron en el programa Salvados.
Mientras que Colruyt vendía un sólo producto de la marca El Pozo, la cadena de Delhaize comercializaba hasta ocho artículos diferentes, los cuales salieron de sus inventarios el pasado lunes 12 de febrero.
De acuerdo con declaraciones hechas por Roel Dekelver, portavoz de Delhaize, esta medida es, al menos, temporal hasta que el proveedor y la marca puedan aclarar la situación, según información expuesta por La Vanguardia.
El País en su portal electrónico describe que el programa que fomentó la denuncia hacia El Pozo muestra como en los espacios donde tienen a sus puercos, algunos de estos animales están desnutridos, enfermos o incluso está muertos, mientras que otros de sus compañeros se alimentan de ellos.
Después de la emisión del programa, El Pozo ha emitido un comunicado en el que explica que debido a los controles de calidad de la propia empresa y los que estipula la ley, sería imposible que animales en esa condición siquiera entraran en sus establos.