- Con el advenimiento de la era digital y la creciente popularidad de las plataformas de video streaming, las marcas han virado su enfoque hacia estas poderosas herramientas para expandir su presencia de maneras innovadoras y efectivas.
- Las plataformas de video streaming, como Netflix, Amazon Prime Video y YouTube, se han convertido en destinos populares para consumir contenido audiovisual. Este cambio en los hábitos de consumo ha llevado a las marcas a reconocer el potencial de estas plataformas como espacios para alcanzar a su público objetivo de manera más directa y significativa.
- En lugar de depender únicamente de los canales tradicionales de publicidad y marketing, las marcas han encontrado en el streaming una forma de llegar a los consumidores a través de múltiples formas.
Las marcas han encontrado en las plataformas de video streaming una excelente manera de llegar a audiencias globales. Tal es el caso de “Flamin’ Hot: El Sabor Que Cambió la Historia” una película que se encuentra disponible en Disney+ y Star+, misma con la que PepsiCo cuenta cómo un conserje mexicano-estadounidense creó una marca de bocadillos de mil millones de dólares.
Y es que nos encontramos en un momento en el que el streaming es la vía para explorar los orígenes dramáticos de marcas y sus productos y servicios (desde Air Jordans de Nike hasta BlackBerry, Tetris y Uber) y donde habitan más formas de contar historias diversas fuera de una lente prohibitivamente limitada, una lente que ha sido particularmente limitada para personajes latinos.
La historia de Richard Montañez, cuenta cómo crece como un niño equilibrando su identidad mexicano-estadounidense en los años 60 en California mientras es atacado en la escuela y abusado físicamente en el hogar. Con el paso de los años, cae en una vida delictiva con su compañera Judy (Annie González) a su lado; pero la llegada de un bebé los obliga al cambio, aunque se enfrentan a un mercado laboral poco acogedor.
Cuando consigue un trabajo como conserje en la fábrica Frito-Lay local, aprovecha la oportunidad con todo el entusiasmo que puede reunir, sonriendo a través de varias humillaciones y agradecido de poder mantener a su familia.
Lo cierto es que trapear pisos y limpiar equipos no lr es suficiente, y cuando el negocio comienza a complicarse con un mercado afectado por la recesión y una serie de despidos, a Richard se le ocurre una idea, una forma de atender al mercado latino desatendido, para hacer el Cheeto… Flamin’ Hot.
La película reconoce claramente la importancia de la comida como identidad cultural y la autenticidad que debería generar convertir esto en una propuesta comercial justa.
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