Existen distintos factores que determinan el éxito de una empresa. Desde la creatividad que implementan en su trabajo hasta los avances tecnológicos que integran en su trabajo cotidiano. Hay un factor fundamental para que toda empresa triunfe: la organización en las labores. La correcta distribución de tareas en tiempo y forma no sólo garantiza que las entregas para los clientes se cumplan en los lapsos acordados, sino que también los colaboradores sepan cómo distribuir sus tiempos de modo óptimo.
Sin embargo, ¿cómo se puede organizar eficientemente las tareas en una empresa? Lo primero que debemos hacer es saber qué es lo que queremos hacer. Dicho en otras palabras, debemos establecer objetivos, los cuales deben ser claros, puntuales y concretos. Pero una vez que ya se tenga esto en cuenta qué recursos, tangibles e intangibles (desde personal hasta equipo) se necesitan para llevar a cabo dicha tarea.
Una vez que se tengan tanto los objetivos como los materiales que se requieren para lograrlos, lo siguiente que se tiene que hacer es considerar el tiempo que nos llevará conseguir dichas metas. Es importante saber elegir un lapso adecuado, el cual no sea sumamente extenso para desalentar al cliente pero que tampoco sea muy poco para forzar marchas.
Ya que se tiene todo lo anterior, habrá que organizar tiempos y tareas para cumplir los objetivos, pero esto se tiene que hacer desde el día de entrega hasta la fecha de inicio del proyecto, ya que esto facilita considerablemente la organización y distribución de labores.
Al momento de considerar al personal que se encargará de cada tarea, habrá que tener en cuenta que debe contar con las capacidades y conocimientos necesarios para realizar el trabajo. Se debe evitar bajo cualquier circunstancia colocar como responsables de una tarea, a personas que no sepan de qué trata y cómo se puede solucionar.