Aunque las ventas online han tenido un crecimiento exhorbitante, los cierto es que, tan solo en México, el 98 por ciento de las compras aún se realizan en establecimientos físicos. Siendo así, muchas de las marca aún se preguntan qué es lo que le hace falta al comercio electrónico para lograr ser considerados tanto como el punto de venta físico.
Al respecto, los especialistas señalan que uno de los factores más considerados por los consumidores al decidir cuál será el punto de venta mediante el que realizarán su compra, es la confianza. Ya que los altos niveles de fraude electrónico, han tenido alcances del 34 por ciento.
Del mismo modo los consumidores han proyectado que prefieren acudir directamente a las tiendas debido a que es una experiencia de compra que el e-commerce no puede ofrecer. Con relación a esto, Daniela Zorrilla, footwear merchandiser de Vans, apunta que, en efecto, la oportunidad de crear estrategias basadas en una experiencia inolvidable, es un forma de conectar con el consumidor, que no existe en las plataformas digitales.
Por otro lado, los consumidores con tendencias digitales, señalan que las compras online representan una oportunidad de ahorro, ya que muchos de los productos suelen tener costos menores gracias a los retailers que ofrecen verdaderas gangas.
Del mismo modo, podemos reconocer que otra de las ventajas del comercio electrónico, es que facilita las compras en cualquier momento y en cualquier lugar, además de que las entregas a domicilio, figuran una experiencia de compra bastante cómoda para los consumidores.
La realidad es que no existe un abismo entre las diferencias de la venta offline y la online, por lo que incluso muchas de las marcas, sugieren que lo ideal es complementar una con otra, con el fin de la activación sea prominente en ambos canales, reforzando el posicionamiento.
