Ciertamente, el segmento de las drogas permitidas se maneja, en muchas ocasiones, en una zona muy opaca, en la que, de un modo u otro, llegan a causar daños a los consumidores, pero que, al mismo tiempo siguen siendo comercializadas por las empresas. Un caso muy claro de esto es el alcohol y otro un tanto más específico es la nicotina a través del cigarro. Para evitar la adicción a éste último han surgido alternativas como el cigarro electrónico, el cual ha sido calificado por la OMS (Organización Mundial de la Salud) como “indudablemente dañino”, de acuerdo con información de Forbes México.
La declaración por parte de la OMS fue parte de la presentación en Río de Janeiro, Brasil, de un informe que realizó el organismo, en el cual también se busca disuadir su consumo, de hecho, desaconsejó su utilización como medio para dejar el cigarrillo convencional.
Tanto la advertencia como la recomendación realizada por la OMS ha surgido a raíz de el aumento de la popularidad y el consumo del cigarro electrónico, el cual cuenta actualmente con 367 millones de clientes, en contraste con los 1,100 millones que tiene el cigarro convencional.
De acuerdo con datos de Statista, se estima que las ventas en línea de cigarro electrónico en todo el mundo fueron de 650 MDD. No obstante, tan sólo en Estados Unidos se registraron ventas por 2,350 MDDde cigarros electrónicos.
Por su parte, Vinayak Prasad, titular de la Unidad de Control de Tabaco de la OMS, ha explicado que el cigarro electrónico acerca a los jóvenes al tabaco, por lo que los legisladores de todo el mundo deben ser más estrictos con la regulación de este tipo de artículos, además de que también recomienda que se especifique qué es lo que contienen estos artículos.
Es importante mencionar que desde 2009 hasta 2017, el consumo global de cigarros ha presentado una caída considerable, al pasar de los 5,884 millones de cigarros al año a los 5,416 millones de cigarros al año.