Las vacaciones de la gran mayoría de los estudiantes están a punto de acabar y con ello también empieza “la pesadilla” para los papás ya que hay que enfrentar varios gastos adicionales, desde los uniformes, los útiles, las colegiaturas, etc. tan sólo por enumerar algunos de los gastos que todos los que somos papás tenemos que cubrir.
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Si seguimos con la tendencia que hemos tenido en otros años, la mitad de los hogares realizan las compras hasta agosto, es decir, a unas semanas de iniciar el ciclo escolar a pesar de que la mayoría de las escuelas entregaron en julio, al terminar clases, las listas de útiles.
La pregunta obligada es ¿estos gastos alteran nuestro consumo de productos de consumo masivo? Veamos cómo cambian los hábitos de consumo del 51% de los hogares que son quienes tienen hijos entre 3 y 12 años.
Hay categorías de cuidado personal que cobran importancia en estas fechas: cepillos dentales, desodorantes, shampoo, lociones, geles para el cabello y acondicionador. Claramente, al menos al inicio del periodo escolar, las mamás esperan que sus hijos se presenten bien arregladitos.
También invierten más en categorías asociadas a la primera comida del día, el desayuno: cereales, yoghurt, leche en polvo, leche líquida, pan de caja, leche saborizada y jugos. Hay otras categorías que pueden ser parte del desayuno o del lunch, entre ellas encontramos categorías como mermeladas, cajeta y miel.
La hidratación es muy importante para que la mente de los niños esté receptiva, por lo que se incrementa la compra de té helado, agua embotellada y bebidas en polvo.
La limpieza también es muy importante, por lo que las servilletas y servitoallas ganan peso en el gasto de los hogares.
Sin duda tenemos un fuerte desbalance en nuestros presupuestos en estas fechas por lo que no es difícil imaginar que en lo que más nos fijamos al momento de comprar útiles escolares es en el precio (para el 49% de los encuestados), la marca (ocupa el segundo lugar, 21%), seguido de la calidad y la duración del producto (12%). Esto no quiere decir que la calidad no importe, pero sí podemos entender con estas declaraciones la fuerte presión presupuestal que presentan los hogares por lo que los precios juegan un rol muy importante en la toma su toma de decisiones.
Aunque en estas fechas lo que más compramos son cuadernos, también vemos que se alteran las compras de varias categorías, por lo que el efecto de la vuelta a clases en las compras de los hogares mexicanos es mucho más complejo (¡¡¡además volvemos a pagar colegiaturas!!!).
Bueno, espero que todos puedan sobrevivir de buena manera a estas fechas y deseamos una feliz vuelta a clases a todos los estudiantes…
