Cuando se habla de bienes raíces, generalmente se piensa en construcciones y desarrollos terminados. Al final, no importa si se venden, conservan o rentan, son la forma en la que la mayor parte de las personas suele recuperar su inversión. Sin embargo, hay otras formas en las que se puede entrar a la industria de los proyectos inmobiliarios. Una forma es, por supuesto, como un asesor profesional. Pero también es posible utilizar un terreno.
En términos de bienes raíces, se considera un terreno aquellos espacios donde aún no existe nada construido. Precisamente porque todavía no se le dedica ningún proyecto, suelen tener un precio mucho menor al de una casa, departamento o edificio de negocios. En ese sentido, muchas personas podrían desanimarse ante la posibilidad de obtener menores ingresos. Pero aunque sean una inversión más humilde, también son una herramienta interesante.
¿Cuáles son las ventajas de invertir en bienes raíces con un terreno?
Oscar Ramírez, broker de RE/MAX Estrategia en Metepec, Estado de México, apunta que entre todos los tipos de bienes raíces, un terreno es el que mejor puede apreciarse a lo largo del tiempo. Esto responde a dos factores particulares sobre cómo evoluciona y cambia la rentabilidad de este tipo de productos inmobiliarios a lo largo del tiempo.
El primer factor, según el experto de RE/MAX, es que los gastos de mantenimiento son bajos. Los edificios ya terminados deben ser cuidados a largo plazo para mantener su valor. De lo contrario, pueden depreciarse para una venta posterior. Por el contrario, señala, un terreno simple y sencillamente existe sin ningún tipo de precaución adicional. Además, al contrario de las construcciones, un terreno viejo no tiende a venderse más barato en el mercado.
Por otro lado, señala que un terreno siempre mantendrá su valor al alza sin importar qué. Esto es porque este tipo de bienes raíces conservan su potencial. Según el experto de RE/MAX, esto es especialmente correcto en lugares con cierto nivel de desarrollo inmobiliario de acuerdo a la demanda o que sirvan de referencia para imponer tendencias.
Imagina que tienes una calle donde ya esté todo construido y solo quede tu terreno. La oportunidad de venderlo a tres veces su valor es del 90 por ciento.