- Con la digitalización, la creatividad en marketing no se limita solo a las calles físicas; también ha encontrado un nuevo hogar en el mundo virtual.
- Una tendencia emergente que ha ganado terreno, ¡y vaya que lo está ganando! es el uso del CGI (Computer-Generated Imagery o Imágenes Generadas por Computadora) para emular acciones de street marketing de una manera impactante.
- A medida que la tecnología avanza y las fronteras entre el mundo real y el virtual se difuminan, el CGI se está convirtiendo en una herramienta poderosa para las marcas que desean crear experiencias de marketing memorables.
Lo que claramente representa la posibilidad de que cualquiera que haya pasado por el barrio de San Nicolás, en Buenos Aires, Argentina, la mañana de este viernes 22, y se haya topado con una intervención en el Obelisco… ¡es mera ficción! Un video se ha viralizado en el que, de arriba a abajo, un condón rosa gigante se desliza por el famoso punto turístico de la región. ¡Increíble! Poner un condón es en realidad una acción de marketing.
Netflix promovió la acción como si se tratara de un street marketing, como parte de la campaña de lanzamiento de la cuarta y última temporada de la serie británica “Sex Education”. Lo cierto es que se trata de un CGI que hizo arder las redes sociales: mientras algunos se divirtieron, otros criticaron el uso del importante monumento para un truco publicitario de esta naturaleza.
Vale la pena recordar que si el CGI hubiera sido un street marketing real, esta no sería la primera vez en que se “cubre” el Obelisco. Anteriormente se había hecho de forma real en campañas de prevención de ETS donde utilizaron estrategias similares. En las fechas festivas de los Juegos Olímpicos universitarios, por ejemplo, también se utilizaron los colores de las banderas para decorar el lugar.
“Sex Education” narra los descubrimientos sexuales de unos adolescentes, que empiezan a hacer preguntas al joven Otis, quien monta una clínica clandestina para solucionar los problemas de sus compañeros. En la cuarta temporada, Otis y sus amigos se mudan a una nueva escuela secundaria, luego de que la antigua fuera cerrada, en medio de controversia.
Al final funda una nueva clínica sexual, pero tiene que afrontar nuevos dilemas y le resulta extraño el ambiente completamente progresista y poco competitivo de sus colegas. Claramente esta acción CGI fue sumamente acertada para que Netflix promocionara su famosa serie.
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