Las promociones, y en específico los meses sin intereses, son una estrategia de marketing BTL cada vez más usada por marcas y retailers, tanto en su canal offline como online.
Al igual que otra promoción, aplicar meses sin intereses a un producto o servicio brinda al cliente la oportunidad de adquirir algo a un precio incluso igualitario a una compra de contado y hacer pagos diferidos para que, en cierto periodo de tiempo, se termine de saldar la deuda, pero con la ventaja de disfrutar del producto y/o servicio desde el primer momento de la compra o contratación.
De acuerdo con el Estudio Anual sobre Preferencias en Promociones 2016, elaborado por nuestro departamento de investigación, los meses sin intereses son la tercera promoción favorita por el shopper en México, que en puntos de venta tiene un 37.8 por ciento de preferencia, mientras que en el comercio electrónico tiene un 36.4 por ciento.
Esta promoción sugiere que, aun cuando se realicen pagos diferidos, el precio ofrecido por la marca se respeta. No obstante, esto es apenas el inicio de un proceso que inicia con el banco y seguramente no se dice al momento de hacer la compra, entre otras cosas.
A continuación presentamos algunos puntos para que, antes de comprar a meses sin interes, pienses dos o más veces en hacerlo, y sepas qué hay detrás de esta promoción.
Descontrola el presupuesto personal
Si no hay un nivel de compra mesurado, es posible que el cliente junte numerosas mensualidades que, al final del día, terminen siendo una bola de nieve que, entre más compras se acumulen, el pago a realizar será mayor y no contar con el dinero suficiente para saldar su deuda.
En resumen, entre más compras a meses sin interese se hagan, la línea de crédito del tarjetahabiente se satura, aun cuando los pagos mensuales son menores.
Motiva compras no planeadas o por impulso
No es lo mismo ver una promoción de un 20 por ciento de descuento que salir de la tienda con un celular nuevo y que podrás pagar en 3,6, 9 o 12 meses.
Saber que se puede tener algo de inmediato, sin que se pague en su totalidad en el momento de ser comprado, representa una oportunidad de tener eso que, tal vez no necesitamos pero, como está a meses sin intereses, se puede adquirir y usar enseguida, lo que derivará en una compra no planeada o por impulso que afecte tu economía.
Invalidación de promoción por atraso en los pagos
Una cosa es comprar a meses sin intereses, y otra muy distinta tardarse meses en emitir los pagos correspondientes. De caer en un atraso, la promoción se invalida y es justo en ese momento cuando comienzan a generarse intereses debido a la omisión de los pagos correspondientes.
Usar esta promoción cuando se trata de productos perecederos o de corta duración
Intentar comprar artículos de belleza, por ejemplo, bajo este esquema de promoción, no es recomendable ya que al terminarse el producto, el pago aún no termina. Es estos casos, se sugiere esperar o buscar un descuento directo al precio.
Cada cliente debe ser consciente de lo que puede pagar, saber si su capital le permiten hacer cierto número de compras, definir si en verdad se necesita el producto o servicio y llevar un control de las transacciones realizadas para que el estado de cuenta no quite te robe el sueño.