Por onceava ocasión McDonald’s es patrocinador oficial de los Juegos Olímpicos. Esto le ha valido al fast food retailer para ganar mayor exhibición de marca y posicionamiento en cada una de las ciudades donde se han llevado a cabo estas justas.
En el caso de Río de Janeiro, la marca de Arcos Dorados ya inauguró un nuevo punto de venta en la Villa Olímpica para alimentar a los asistentes del evento, pero también a los atletas. Sin embargo, ¿cómo planea este fast food retailer alimentarlos, si estos personajes están sujetos a regímenes alimenticios especiales?
La marca ideó el“food journey”, una estrategia de Retail Marketing que se apega a la Agenda del Comité Olímpico Internacional (COI) 2020.
De este modo, McDonald’s dará sándwiches Filet O’Fish hechos con pescado verificado por el Marine Stewardship Council (MSC), así como café certificado por la Rainforest Alliance (RFA) en recipientes para bebidas calientes también verificados por la Forest Stewardship Association (FSA).
La intención de la marca es mantener una visión sustentable de sus materias primas y la preservación de las áreas forestales, pero también no salirse de los estándares alimenticios para poder proveer a los atletas de productos que entren en su régimen alimenticios.
¿Qué pasaría si McDonald’s aplicara estas medidas en México, un país con altos índices de obesidad? Si bien la marca se ha dado a la tarea de poner en las manteletas el número de calorías que incluyen sus productos, aunque no es suficiente para fomentar una cultura alimenticia mucho más equilibrada.