El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) señala que los accidentes de tránsito son la primer causa de muerte entre niños de 5 a 14 años y a segunda para jóvenes entre 15 y 29 años, por ello muchas instituciones han emprendido campañas de marketing social para prevenir este tipo de hechos y sobre todo para proteger la vida de los más pequeños de la familia.
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Por ello el Instituto Paz no Trânsito de Brasil ideó una campaña que consistió en montar una exposición con todos los juguetes de niños y niñas que murieron en accidentes de tránsito.
Además cada pertenencia estaba acompañada por un vídeo en el que muestra como era la vida del niño y como de un momento a otro y por una imprudencia o descuido dejo de existir.
Esta campaña que estuvo a cargo de la agencia OpusMúltipla, para muchos fue muy estremecedora pero contó con la autorización de los padres o familiares de las víctimas, quienes resaltaron esta iniciativa por parte del Instituto de Tránsito.
Esta campaña demuestra que el below the line no sólo sirve para promocionar (y vender) un producto sino también para causas sociales, una de ellas, la prevención de accidentes automovilísticos como lo realizado en Brasil.