La mejor manera en que una marca puede promocionar su productos es demostrando que tan eficiente y seguro es y para ello recurren al below the line, esta disciplina de marketing que deja una huella en el espectador tal y como lo hizo Bissell, marca canadiense de aspiradoras que realizó una activación un poco arriesgada para sus productos.
Para ello, Ravi Dalchand, sr, brand manager de Bissell recurrió a una transitada estación del metro canadiense para que los espectadores comprobaran que el modelo Symphony All-in-One es tan efectiva que al momento de limpiar la superficie elegida se puede comer hasta de ahí.
Fue entonces cuando Dalchand limpió un cuadro del anden dejándolo reduciendo de limpio para posteriormente tirar papas a la francesa y ante la mirada atónita de todos los transeúntes sin más ni más empezó a comérselas.
De esta manera la marca demostró que sus productos son tan confiables que limpian cualquier superficie incluyendo una que es pisada por miles de personas al día.
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