Un siglo de vida es la que tiene Santa Clara en el mercado. Es una marca creada en Hidalgo, que nació en 1924 como un pequeño establo de 17 vacas que repartían leche a domicilio en la capital del estado, camino que con el paso del tiempo trascendió hasta ser hoy una de las marcas de lácteos más importantes con más de 2,200 cabezas de ganado.
Cuatro años después de su inauguración, logró instalarse en una fracción de la exhacienda de Coscotitlán. Para 1936, Santa Clara ya era un negocio consolidado con más de 100 cabezas de ganado, lo cual propició que se trasladara a un sitio de mayores dimensiones, al norte de Pachuca.
Un par de años más tarde, y más específicamente en 1957, la marca vivió un momento clave al adquirir tecnología para la ordeña mecánica. Esto permitió un mayor desarrollo, haciendo que se mudaran a un rancho llamado “La Quinta”, que contaba con corrales más modernos y funcionales. Y a finales de la década de los 90, la compañía llevó a cabo una remodelación de sus instalaciones y con ello albergar a más de 2,200 cabezas de ganado, que son con las que cuenta en la actualidad.
Desde julio de 2012, Santa Clara formó parte del portafolio de Coca-Cola, la cual es actualmente administrada a través de Jugos del Valle, una de sus subsidiarias. Hoy en día, esta marca envasa también más de 30 sabores de helados, 6 tipos de quesos, yogures, generando además 3,500 empleos directos y más de 17,500 indirectos.
Y para celebrar sus 100 años, lanzó una serie de productos y empaques de edición especial, elaborados en colaboración con Pineda Covalín.