Los vaporizadores se han vuelto una tendencia desde hace ya un par de años, debido a que algunos estudios revelan que estos dispositivos libres de humo han ayudado a una cantidad significativa de personas a disminuir su consumo de cigarros tradicionales.
No obstante, desde el 2014, estos artefactos no cuentan con la autorización de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) para ser comercializados en México, ya que “carecen de reconocimiento científico”, además de no integrar regulaciones que gestionen su venta a menores de edad, por lo que más de 160 mil adolescentes los usa habitualmente.
Al respecto, los consumidores de estos cigarros electrónicos señalan que a pesar de la prohibición de su venta, es bastante fácil conseguirlos en puntos de venta offline, pero sobre todo en plataformas digitales. Mientras tanto, la Cofepris se ha encargado de decomisar anualmente 1.3 millones de pesos en este tipo de dispositivos.
Por su parte, los especialistas apuntan que tendrían que pasar al menos 20 años para conocer los efectos de estas alternativas, asegurando por ahora, que las sustancias activas que “vapea” este sector de los consumidores, sí es tóxica. Así mismo, Ricardo Cárdenas, supervisor de Vigilancia Sanitaria de la Cofepris, señala que las cantidades de nicotina que se consumen por medio de vaporizadores, no está correctamente suministrada, además de que contiene saborizantes que pueden “liberar ciertos elementos carcinógenos, como zinc y alquitrán”.
Las medidas de las autoridades ante el consumo ilegal de vaporizadores
Está claro que aún con las restricciones establecidas por la Cofepris, el consumo de estos productos libres de humo no deja de ser una tendencia, incluso creciente. En este contexto, las autoridades consideran incorporar vaporizadores (y otras alternativas de consumo de nicotina) al programa de espacios 100 por ciento libres de humo; por lo que los consumidores tendrían que responder a las mismas restricciones que quienes fuman cigarros tradicionales:
- No “vapear” en áreas cerradas
- No exponer publicidad
- Ser acreedores de multa en caso de no acatar las disposiciones