El desarrollo sostenible es uno de los objetivos buscados por las empresas de distintos sectores. El propósito de crecer sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras es tan relevante, desde el producto hasta iniciativas que promueven el cuidado de la naturaleza, que hoy en día es parte de la estrategia de las marcas.
De acuerdo con el reporte Las 10 principales tendencias globales de consumo para 2019 de Euromonitor International, los consumidores son más conscientes que nunca, por lo que ponen a prueba a todos los productos desde los cosméticos hasta los farmacéuticos.
Por otro lado, “el aumento en el número de vegetarianos y veganos también ha contribuido a una creciente demanda por alimentos y bebidas con etiquetas que hacen referencia al bienestar animal”, señala Euromonitor International.
En tanto, las Naciones Unidas en su documento Transformar Nuestro Mundo: la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, que fue adoptado por 193 Estados Miembros, incluye 17 Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS), con el propósito de luchar contra la desigualdad y la injusticia, poner fin a la pobreza y hacer frente al cambio climático.
Los objetivos que promueven las Naciones Unidas son los siguientes:
- Fin de la pobreza
- Hambre cero
- Salud y bienestar
- Educación de calidad
- Igualdad de género
- Agua limpia y saneamiento
- Energía asequible y no contaminante
- Trabajo decente y crecimiento económico
- Industria, innovación e infraestructura
- Reducción de las desigualdades
- Ciudades y comunidades sostenibles
- Producción y consumo responsables
- Acción por el clima
- Vida submarina
- Vida de ecosistemas terrestres
- Paz, justicia e instituciones sólidas
- Alianzas para lograr los objetivos
Actualmente, las estrategias de sustentabilidad se centran en crear acciones que generen conciencia en al vida del consumidor. El reto es integrar acciones que cuenten con la capacidad de satisfacer las necesidades del consumidor a través de un impacto menor al ambiente.
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