Entre más viejo te haces, la ley de la vida te dota de frases como “en mis tiempos”, “mi generación si que era trabajadora”, “los chavos de ahora”, por citar algunas para que caiga en la cuenta. Lo cierto es que entre más años, más vivencias, pero en la actualidad no es sinónimo de mayor experiencia.
Los esquemas se rompieron, me ha tocado estar sentado al lado de jóvenes de preparatoria que hacen proyectos impecables, adolescentes que manejan las redes, dispositivos, robótica y computación de manera excepcional, o qué me dice de los miles de chavos que disfrutan de vidas millonarias gracias a sus negocios emergentes.
El camino por el cual nos dijeron que debíamos irnos: “estudiar, trabajar, trabajar y trabajar”, ha cambiado por modelos que incluyen diversión, especialización hasta la medula, mezclas de campos o propuestas, así como una creciente “estrellificación” de las personas (todos queremos ser famosos y comportarnos como tal). Por lo que es común ver como existen ánimos diversos en relación al ejercicio de la administración del marketing.
Les comparto 4 perfiles de nuevos mercadólogos, entre muchos otros que existen y espero ir develando:
LOS PROGRE: existe una gran cantidad de jóvenes emprendedores, estudiantes y autodidactas que llevan a la práctica años de teoría que antes solamente se aprendían a punta de golpes. Son los líderes que siguen respetando el orden, las jerarquías y las instituciones, pero por medio de proponer, es que logran generar disrupción.
LOS DEL LADRILLO: los que luego de 250 likes en una publicación se creen la última coca del desierto, son los típicos mercas que después de una campaña se dedican a dar consejos sobre “cualquier” tema, aunque en la vida real no han emprendido más que ese engranaje virtual por el que creen que su retiro está asegurado.
LOS “BIJAN”: son grises, pasan todo el tiempo desapercibidos, en su casa saben que estudiaron o estudian algo que suena a inglés, pero en realidad como son tan sigilosos, pocas veces revelan que son los artífices de grandes cambios, son los mercas que alejados de los reflectores, toman las decisiones administrativas, logísticas y mercadológicas sin esperar que les toquen una diana cada que lo hacen.
LOS COPIONES: ven cualquier cosa y la aplican en lo inmediato, si ven que alguien que siguen en sus redes, se dedica a cantar y le esta funcionado, no tardan en subir un video cantando. Con frecuencia se autonombran expertos, charolean con certificados o acreditaciones hechas por su propia “agencia” y si tiene que vender a su madre porque es la tendencia que le vieron a un coach, no dudan en hacerlo.
La pregunta del inicio agrupa a todos los nuevos mercas, pero sería un delito integrarlos a todos, sabiendo que incluso la vida se encarga de segmentar. Es cierto que existen mercadólogos que son tomados en cuenta más allá de sus capacidades, abundan por desgracia los que venden espejitos y lamentablemente también, están los que por mucho talento, pasan desapercibidos por su falta de imagen personal.
Siendo fiel a mi edad (que esta entre una generación y otra), debo confesar que en ocasiones no se hacia que lado hacerme, por lo que termino por cumplir un precepto que mezcle la integración de la actualidad, sin olvidar que no puede existir progreso sin orden ni respeto.