Una de las estrategias más impactantes para dar visibilidad a una marca tiene que ser viral. Los flashmobs son perfectos para ello.
Aunque los flashmobs no son en sí una técnica exclusiva del marketing BTL, se emplea con gran éxito para realizar guerrilla marketing. Esto se debe a que se puede conseguir un gran impacto con el mínimo de inversión.
Dichos fenómenos ayudan a mostrar y reforzar la identidad de una marca.
El flashmob como método de marketing BTL
Los Flashmob comienzan su revolución con la llegada del nuevo siglo, justo cuando surgen las redes sociales. Grandes grupos de gente que no se conoce se junta para hacer alguna rutina coreográfica.
En sus comienzos, se veían como el ensayo de una tendencia. Los Flashmob contribuyen a hacer una sociedad más ágil bajo la premisa de la intercomunicación.
Los flashmobs son, del modo más básico, gente reunida bajo estas características:
- La convocatoria no es a través de medios masivos, sino por redes sociales o una convocatoria viral en la web.
- Un conjunto de personas reunidas en un espacio público.
- El flashmob es rápido, no debe durar más de cinco minutos
- Siempre busca proponer algún tema. En especial, la idea es atraer la atención de las personas que están cerca.
En general, “flash”, que significa algo rápido, espontáneo o ágil, es la característica más destacada de dicho evento; y “mob” que quiere se refiere a movilidad; ambas palabras se juntan para crear un término que se acopla perfectamente al ritmo de la modernidad para generar una acción que sorprende, emociona y cautiva al consumidor.
Así, se puede decir que un flashmob es tan concreto, rápido y dinámico que cualquier marca debería apostar por un movimiento de tan gran impacto.