Se ha convertido en el target favorito de casi todas las estrategias de marca y la audiencia principal de toda activación física o digital. Pero ¿por qué es tan importante? Bueno, lo es porque se estima que, dentro de 3 años, más de 50% del poder adquisitivo mundial estará (finalmente) en manos de millennials.
Si bien me parece que no debemos olvidar a los Gen X y Gen Z, si creo que hay qué tomar en cuenta la influencia que los millennials tienen en la manera que funciona el mundo hoy en día, por tanto hay 5 “ismos” que debemos considerar a la hora de desarrollar estrategias de atracción, no solo de millennials, sino dirigidas a cualquier audiencia inmersa en la era digital.
- El Smartphonismo: Hagas lo que hagas, no despegues al usuario de su dispositivo móvil. El smartphone es considerado mucho más que solo un dispositivo para comunicarse, es un potencializador de experiencias de toda índole: sociales, informativas, de entretenimiento, etc. Por tanto aprovechemos mejor las posibilidades que brinda el hecho de que más del 70% de los usuarios de telefonía móvil cuentan con un smartphone en su bolsillo.
- El Shareismo: Si no compartes una selfie desde un evento ¿realmente fuiste?, si no haces check in en el gimnasio ¿realmente hará efecto el ejercicio?. Frases así parecen tonterías, pero el no compartir lo que hacemos, comemos, creemos, pensamos o vivimos puede volvernos casi invisibles (incluso inexistentes) en la actualidad. Por tanto es importante darle al usuario pretextos para compartir, ponerle en charola de plata la oportunidad de subir una selfie, de convertir un check in en algo tangible y útil, de potencializar su experiencia de marca en el punto de venta, en su casa o en la calle.
- El Commentismo: El recién desaparecido escritor Umberto Eco dijo hace unos meses que “Las redes sociales le han dado voz a una legión de idiotas”. Tal vez sea un poco extremo, pero lo cierto es que desde que existen las redes sociales nos hemos vuelto expertos en todos los temas y nos encanta opinar sobre todo, incluso sin saber nada sobre dichos temas. Dar de qué hablar, ser el trending topic, generar conversación orgánica, etc. Son objetivos que debemos considerar si queremos trascender más allá del anaquel.
- El Likeismo: Hay 2 tipos de Likeismo, 1 dar y 2 recibir. Para las marcas, recibir LIKES lo es casi todo. Significa aprobación, engagement, que la estrategia va bien, que lo que hacemos está gustando. Y no está mal, tal vez no sea lo único importante a la hora de aterrizar una estrategia de atracción, hay acciones mucho más valiosas que el simple hecho de recibir un LIKE, pero si es importante saber qué le gusta a la gente: La diversión, la sorpresa, la emoción, la polémica y la utilidad. Hacer cosas que aprovechen estas 5 cosas nos darán puntos a favor con una audiencia urgida de darle LIKE a todo lo que se mueve.
- El Viewismo: A pesar de lo engañoso que puede resultar sigue siendo la métrica más anhelada por las marcas el día de hoy: las reproducciones. Debemos tener en claro que, en la era digital, si no produces tu activación/evento/experiencia en el mundo real para causar un efecto en el mundo digital, prácticamente es como si no hubieras hecho ¡NADA!. Si, considera siempre en tu presupuesto el levantamiento de imagen (foto y video) de todo lo que hagas en el mundo real, no sabes cuantos views podrías estar perdiendo si no lo haces.
En resumen: Aquellos que nos dedicamos 24/7 a la generación de ideas que atraigan y comuniquen los valores y beneficios de las marcas a una audiencia cada vez más selectiva y difícil de cautivar, debemos ser los más atentos a los cambios y variaciones en las conductas de las audiencias. Estos son solo 5 aspectos, pero hay más, así que sigamos buscando mantenernos relevantes en una era donde es fácil que nuestra comunicación se pierda en un mar de views, likes, comments, shares y dispositivos móviles.