Enséñale esta historia al cliente o jefe que no crea en el gran poder de una buena idea publicitaria para lograr mejores ganancias y crear un verdadero efecto viral. David Johns, un publicista promedio que vive en Australia, tuvo la necesidad de vender su viejo Holden Barina del año 1999 (el Opel Corsa de otros países y que en México se vendió a pasto bajo la popular marca “Chevy”).
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Para ello, David pudo haber hecho lo que cualquier individuo que respete su reputación de persona promedio: anunciarlo en el periódico, colocarle un anuncio de “se vende” u ofrecerlo a sus conocidos, esperando recibir el monto que un viejo coche así vale.
En lugar de eso, y para también promocionar una agencia de marketing digital (Chimney Digital), la agencia y David unieron fuerzas para ir más allá y comprobar el poder de una buena campaña below the line para ofertar un automóvil con 15 años de antigüedad y 188,000 kilómetros de recorrido como si fuera algo novedoso y deseado.
La idea fue entonces vender el automóvil como si se tratara de un reluciente coche bueno con un spot ad-hoc al que usan las grandes marcas. Eso sí, sin tapar los rayones, cicatrices y achaques que ha tenido el automóvil. ¿El precio? David decidió subastarlo vía Twitter para otorgarlo al mejor postor, incluso, en más del doble de lo que realmente valía. Las ofertas sólo debían incluir el hashtag #buymybarina.
Para informar detalladamente a los posibles interesados sobre las características del automóvil, así como la mecánica para realizar una oferta, David y la agencia Chimney Digital crearon el sitio www.buymybarina.com, con datos concretos, información honesta y un spot, que durante los primeros dos días de exposición en Youtube, tuvo más de 10,000 vistas (orgánicas, claro está) y al día de hoy suma más de un millón de views y arriba de tres mil “likes”
Ahora, debido al gran éxito en respuestas y comentarios que ha tenido la comunicación del peculiar coche (que por cierto, en la Ciudad de México ya tendría que circular todos los sábados portando su calcomanía 2), la agencia Chimney Digital y David Johns han decidido aprovechar las circunstancias para una noble causa: colaborar con las ganancias para una asociación a favor del cáncer en su país: Cancer Council Australia.
He aquí el spot empleado:
Y tú, ¿cómo venderás ahora tu automóvil?